Sumar, el 'Pequeño Frankenstein' de Díaz sin Montero y con Iglesias resignado, o meditando un último desafío para el 23-J
Mientras en el Comité Federal del PSOE aparece una ruidosa protesta de algunos barones y dirigentes contra Sánchez por la confección de listas electorales sanchistas, en la extrema izquierda Yolanda Díaz ha impuesto su liderazgo sobre Podemos, expulsando a Irene Montero y uniendo a todo un conglomerado de 15 pequeños partidos. Con los que ha construido, a la imagen y semejanza de los pactos de Sánchez, su ‘Pequeño Frankenstein’.
Con el que Díaz espera superar los 35 diputados que Podemos obtuvo el 10-N de 2019. Para ver si Sánchez se acerca a los 100 diputados frente a la escalada del PP de Feijóo y en los comicios del 23-J, y con la ayuda de los nacionalistas, se logra el milagro de una nueva mayoría de la izquierda para gobernar, tras el estrepitoso fracaso en las elecciones del 28-M.
Sin embargo, el precedente del 28-M, las rebeliones en en PSOE y la pelea entre Sumar y Podemos hace muy difícil imaginar que Feijóo no alcance la presidencia del Gobierno el 23-J, con el apoyo de Vox.
Partido con el que el PP mantiene serias discrepancias como se aprecia en los problemas que ya están surgiendo en el bloque de la derecha para la formación de gobiernos en Alcaldías y Comunidades Autónomas donde PP y Vox suman mayorías frente al bloque de la izquierda tras los comicios del 28-M.
El ocaso de Iglesias y Montero
El viernes día 9 acabó el plazo para la inscripción ante la Junta Electoral de las coaliciones que concurrirán a las elecciones generales del 23-J. Y Sumar presentó su participación con la firma de Ione Belarra en nombre de Unidas Podemos y a pesar del veto de Díaz a Montero. Pero con la velada amenaza y advertencia de Belarra a Díaz de que ‘no aceptan’ la exclusión de Montero.
Cuestión que Belarra pretende solucionar en los ocho días que quedan para que las formaciones políticas que concurren a las elecciones presenten sus definitivas listas electorales, antes de que se cierre el plazo del día 19.
Amenaza de Belarra -en el nombre de Pablo Iglesias- de la que se podría deducir que, si Yolanda no rectifica antes del 19 y no recupera a Montero, los dirigentes de Podemos podrían presentar a las elecciones del 23-J otro nuevo partido de la izquierda radical.
Como el que el pasado día 8 se inscribió en el ministerio de Interior con el nombre de ‘Juntas sí se puede’, y que presentó el dirigente de Podemos Carlos Gil Cuevas poniendo como dirección de la sede oficial de Podemos.
Lo que en Podemos se calificó de un ‘error’ y dijeron que lo iban a anular. Pero no sabemos si el ‘error’ solo se refería a la dirección de la sede, o a la creación del partido, que todavía podría permanecer inscrito en Interior y a disposición de Pablo Iglesias y de otros primeros dirigentes de Podemos.
Aunque no parece que Iglesias esté en condiciones de torpedear la unidad de la izquierda radical que tanto defendió, ni con ganas de volver a primera línea de la política. Lo prueba sus última y resignada declaración en la que ha dicho: ‘me voy a callar para que no se me caigan las lagrimas, eso sí, de orgullo’. En referencia a su compañera Irene Montero.
Ahora bien, si Belarra cumple su amenaza y aparece un nuevo partido ello obligaría a Díaz (como ya ocurrió con una intentona similar de Podemos en Valencia) a expulsar de sus listas a todos los candidatos de Podemos.
Con lo que Yolanda se quedaría con el control de su ‘Pequeño Frankenstein’ y su solo liderazgo personal como el único referente, además de la figura de Errejón y de algunos líderes regionales y locales poco conocidos.
Las espadas de Yolanda Díaz y Pablo Iglesias no sabemos aún si han sido envainadas o siguen en alto. Y sin descartar una batalla cainita y electoral entre Sumar y ‘Juntas si se puede’. Desde donde los de Podemos podrían intentar un grupo parlamentario de ‘Juntas’ en el Congreso, lo que solo es posible si los diputados de ese Grupo no participaron en las elecciones con otro partido o coalición.
De manera que en tan solo 8 días sabremos el desenlace de esta situación, cuando el lunes 19 se acabe el plazo de presentación de listas electorales y veamos cómo queda la situación de Sumar.
Ese ‘Pequeño Frankenstein’ desde donde la implacable Yolanda Díaz ha liquidado din pestañear a Montero y a Iglesias, con la ayuda y el consejo de Pedro Sánchez que en todo momento apoyó esta ‘depuración’. De los que parecían la pareja de los Ortega (nicaragüenses) o los Ceaucescu (rumanos) de la extrema izquierda española, ahora en vías de desaparición.
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