Pasajera en aeropuerto Dulles ayuda a localizar al ladrón que robó su computadora
El regreso a casa para las vacaciones tomó un giro inesperado para una joven que volaba por el Aeropuerto Internacional Dulles luego de que alguien robara su mochila.
“Sin embargo, lo más importante era mi computadora portátil, que había tenido durante 10 años”, afirmó “Jane”, nombre que la víctima escogió como pseudónimo.
Jane, nativa de Virginia que ahora vive en otro lugar, denunció el robo el año pasado a la Autoridad de Aeropuertos Metropolitanos de Washington (MWAA, en inglés).
Jane dijo que MWAA le indicó que el robo podría haber sido captado por la cámara, pero no estaban seguros de poder identificar a la persona. Cada día, más de 60,000 pasajeros pasan por Dulles.
Pero resultó que identificar al sospechoso fue fácil. Según el informe policial, la persona captada en el vídeo de vigilancia robando su mochila trabajaba en el aeropuerto para Smart Carte, la empresa que proporciona carritos de equipaje de autoservicio para los pasajeros.
El equipo investigativo de News4 se enteró de que, aunque la policía identificó al empleado, no fue arrestado de inmediato y se le permitió permanecer en el trabajo durante más de un mes mientras continuaba la investigación.
“No pudieron arrestarlo todavía porque necesitaban más para obtener una orden de registro y recuperar mi computadora”, explicó Jane.
Entonces un mensaje inesperado cambió todo. Jane dijo que se despertó una mañana con un mensaje de texto de una cuenta anónima de Instagram. Cuando lo abrió, encontró una foto de ella desnuda.
Jane dijo que no tenía dudas de dónde venía la foto. Era parte de un proyecto de arte almacenado en su computadora portátil y dijo que no se lo había enviado a nadie.
EL LADRÓN PIDE DINERO Y MÁS FOTOS
La mujer se puso en contacto con el investigador de la MWAA que trabajaba en su caso y le dijeron que si se sentía cómoda, debía intentar hablar con la persona que le envió el mensaje.
“Realmente no quería, pero quería recuperar mi computadora”, expresó.
Jane hizo lo que le pidió el oficial e inició una conversación, que compartió con el I-Team.
“Le pregunté: ‘¿Qué quieres?’”
Él respondió: “Más fotos tuyas”.
Luego las cosas dieron otro giro. La persona pidió dinero.
“Me pidió 3,000 dólares”, relató Jane. “Creo que vio una oportunidad para intentar chantajearme. Me encontraba muy molesto. Nunca antes había estado en una situación como ésta”.
Queriendo tomar el control de la situación, Jane decidió hacer su propio trabajo de detective. Utilizando una herramienta de búsqueda en línea, descubrió la dirección IP del sospechoso e incluso sus coordenadas GPS.
“Regresó como una dirección IP registrada en Springfield, Virginia”, señaló.
La mujer pasó esa información a la policía, quien la vigiló y finalmente obtuvo una orden de registro.
Pero esto podría haber sido diferente, según Fernando Uribe, agente especial del FBI que trabaja en casos de sextorsión como este. Dijo que normalmente no se animaría a la víctima a comunicarse con la persona que la explota.
“No conocemos la experiencia en línea de estas personas, ¿verdad? Podrían ser muy buenos manipulando los medios electrónicos, o podrían simplemente entender lo que ella está tratando de hacer y entonces el plan podría empeorar”, advirtió Uribe.
Rob Yingling, portavoz de la MWAA, defendió la decisión de incluir a Jane en la investigación, diciendo que sus agentes están completamente capacitados, al igual que la policía que trabaja en las comunidades locales.
“Todo lo que puedo decir es que nuestra policía trabajó con la víctima para obtener pruebas procesables de que pudieron seguir adelante con un caso sólido”, enfatizó.
La policía finalmente arrestó al sospechoso y recuperó la computadora portátil de Jane, aunque había sido limpiada.
“Para que un proceso de investigación se desarrolle de manera legal, hay que ser muy metódico”, dijo Yingling. “También se lleva a cabo mucho trabajo interno de la agencia, porque esta investigación salió del campus del aeropuerto”.
Jane demandó al sospechoso en un tribunal de reclamos menores, con la esperanza de recuperar el costo de la computadora portátil y ser compensada por la angustia emocional que le provocó.
“Mi motivación nunca fue enviar a alguien a la cárcel. Fue para obtener algún tipo de justicia por lo que perdí”, aclaró.
Las dos partes finalmente resolvieron el caso, dijo Jane.
El News4 I-Team intentó contactar al hombre acusado de robar su computadora portátil, pero no tuvo éxito. Fue arrestado y enfrentado varios cargos, incluida amenaza de extorsión. Sin embargo, los fiscales desestimaron esos cargos después de que se declarara culpable de hurto menor y recibiera 12 meses de libertad condicional.
Un portavoz de Smarte Carte dijo al I-Team: “Si bien las autoridades no proporcionaron a Smarte Carte detalles de esta investigación, Smarte Carte coopera plenamente con las autoridades cuando se les solicita”.
Smarte Carte despidió al hombre después de que MWAA suspendiera su placa de seguridad.