Detenida en Washington una ciudadana rusa por actuar como agente del Kremlin
Apenas horas después de la reunión entre Trump y Putin en Helsinki y de la insistencia de ambos en negar cualquier tipo de trama rusa en las elecciones de 2016, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha emitido un comunicado en el que anuncia que ha detenido a una ciudadana rusa de 29 años que responde al nombre de Maria Butina, a la que imputa el cargo de conspiración para actuar como agente de Rusia dentro de Estados Unidos. La pena máxima contemplada es de cinco años de prisión.
La detención se produjo el domingo 15 de julio. Según recoge la nota oficial, Butina trabajó desde 2015 hasta febrero de 2017 bajo dirección de un oficial de alto rango del gobierno ruso, muy probablemente Alexander Torshin, vicegobernador del Banco Central de Rusia, investigado en España por blanqueo y actividad mafiosa, y uno de los 24 ciudadanos rusos sancionados en abril por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por su participación «en acciones perversas en todo el mundo», incluida la posible injerencia rusa en las elecciones estadounidenses que llevaron a Trump a la Casa Blanca.
Los documentos judiciales explican los «esfuerzos de Butina por actuar como un agente de Rusia dentro de Estados Unidos con el propósito de desarrollar relaciones con personas de Estados Unidos e infiltrarse en organizaciones con influencia en la política americana, con el propósito de promover los intereses de la Federación Rusa». Según el Departamento de Justicia, Butina «emprendió sus actividades sin informar oficialmente de que estaba actuando como agente del gobierno ruso, tal y como requiere la ley».
Maria Butina es la presidenta de El Derecho a Portar Armas, un grupo ruso fundado en 2012 que emula los objetivos de la NRA, la Asociación Nacional del Rifle de Estados Unidos, el lobby más importante del país, del que Torshin era socio y a través de la que habría tratado de establecer contactos entre Rusia y la campaña de Trump. Butina, que ha acudido a varios de los congresos anuales de la NRA, uno de las principales donantes de la campaña de Donald Trump, organizó en 2015 una visita a Moscú de algunos de sus integrantes, en la que Torshin estuvo presente.