Hallan en Tenerife los cadáveres de un matrimonio y sus dos hijas
Conmoción en la localidad tinerfeña de La Orotava. Un matrimonio y sus dos hijas fueron localizados ayer sin vida en el domicilio familiar. El hombre, de unos 50 años, era Brigada del Ejército y fue hallado ahorcado en una habitación distinta de donde se encontraron los demás cuerpos, que además no presentaban signos aparentes de violencia. La madre tenía 32 años y las dos menores, 3 y 5 años. Las tres estaban tendidas sobre una cama. También se encontró el cuerpo sin vida del perro de la familia, pero no se hallaron armas de fuego en el domicilio.
El alcalde de La Orotava, Francisco Linares, informó de que el hombre dejó una nota explicando supuestamente por qué lo hizo. Añadió que no constan denuncias previas ni antecedentes por violencia. Por su parte, el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de la localidad, Narciso Pérez, comentó que, hacia las 12:30 horas, la Guardia Civil recibió una alerta en la que informaba sobre estos hechos y al acceder al interior de la vivienda encontró los cuatro cadáveres.
Fue la abuela materna de las niñas, que vive en una vivienda contigua, la que dio el aviso tras desplazarse a la casa porque nadie contestaba a sus llamadas. Al parecer la pareja y las dos niñas habían asistido el día anterior a una fiesta familiar y nadie había percibido nada extraño. Según los vecinos, llevaban una vida normal sin que se conociera ningún hecho previo de supuesta agresión.
A la espera de los resultados de la autopsia, según Diario de Avisos, una de las hipótesis que se baraja es el envenenamiento.
Fuentes de la Guardia Civil apuntan que todas las hipótesis se mantienen abiertas y al cierre de esta edición los agentes seguían trabajando en la vivienda para recabar más indicios sobre lo ocurrido hasta confirmarse con el Instituto de Medicina Legal las causas de las muertes.
El alcalde de La Orotava señaló que es un día «trágico». Las autoridades no quisieron pronunciarse sobre si se trata de un nuevo caso de violencia de género hasta no tener los resultados de la autopsia, sobre todo por no encontrar en un principio signos evidentes de agresión.
Los vecinos de la calle Cruz de Los Martillos, donde residía el matrimonio con sus hijas se vieron sorprendidos con el suceso y expresaron su pesar. Insistieron en que se trata de una familia «fabulosa» que llevaba muchos años viviendo en la casa y que las dos niñas eran «preciosas».
La familia de la mujer fallecida vive en la casa colindante a la de la pareja y hasta allí se desplazaron psicólogos del Servicio de Urgencias canario para prestar asistencia.