Toni Gaspar, nuevo presidente de la Diputación de Valencia: «Las instituciones no son intocables»
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Gaspar ha recibido los apoyos del PSPV-PSOE, Compromís, València en Comú y Esquerra Unida puesto que únicamente los socialistas han presentado candidato de acuerdo al pacto de Gobierno con las fuerzas de izquierdas. Por su parte, el PP ha votado a la portavoz del grupo, Mari Carmen Contelles, que ha obtenido 12 apoyos. Mientras, Ciudadanos lo ha hecho en contra de los dos candidatos al proponer un «gobierno de transición» formado por toda la corporación y la papeleta se ha declarado nula. El diputado no adscrito José Enrique Aguar ha optado por votar en blanco.
Durante la sesión, celebrada 20 días después del arresto de Rodríguez, también ha tomado posesión como diputada provincial Rebeca Torró tras asumir el acta que ha dejado vacante el expresidente de la Diputación. La votación del nuevo responsable se ha producido antes de la intervención de los representantes de cada grupo, de modo que no ha habido ocasiones de réplica.
Gaspar, quien ha prometido su cargo, ha iniciado su discurso elogiando a su antecesor, a quien ha deseado «lo mejor». «Apartarse para no entorpecer el funcionamiento de la corporación no es algo muy habitual y le honra», ha señalado, a la vez que ha hecho un llamamiento a esperar a que la justicia se pronuncie. Escasa mención a la investigación de la denominada Operación Alquería y breve a la situación sobre cómo quedará Divalterra. «No hay que confundir el cierre ordenado con estar locos, porque los 700 puestos de trabajo están garantizados y lo que se tiene que ver es la forma jurídica en la que se prestan esos servicios», ha indicado.
Con un mensaje continuista en el que ha defendido la gestión realizada hasta el momento por el equipo de Gobierno y su intención de seguir con la hoja de ruta de 2015, Gaspar ha señalado que «las instituciones no son intocables». «La Diputación no es una excepción. Si hay una forma mejor de hacer las cosas, es una obligación hacerlo respetando las normas», ha añadido.
Imagen de los miembros de la corporación provincial
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MIKEL PONCE
Gran parte de su intervención ha estado dedicada a reflexionar de forma amplia sobre la clase política, realizando autocrítica. «Los políticos de primera línea contribuimos al caos. Nos olvidamos de que hay que hacer política a largo plazo. Sacamos miserias para llevarnos aplausos de los nuestros. ¿En qué momento hemos pasado a ser personajes de opereta? ¿Cuándo decidimos hablar sólo a los hooligans de nuestras formaciones?», se ha preguntado.
La toma de posesión de un nuevo presidente provocada por el arresto del anterior no ha sido apenas mencionado por los partidos de izquierdas, los cuales han tenido mucho más presente en sus intervenciones al exresponsable del PP Alfonso Rus, también arrestado e investigado por el caso Taula.
La oposición, por su parte, ha atacado la supuesta corrupción del PSPV y de Compromís porque «los que venían a cambiarlo todo han hecho política para los suyos». La portavoz del PP, Mari Carmen Contelles, ha afirmado que «esto no es una investidura, es una tomadura de pelo» y por ello Ximo Puig «no se atrevido» a acudir al pleno. La de Ciudadanos, Mamen Peris, ha alertado a Gaspar de que ocupa un sillón que lleva «dos legislaturas bajo sospecha de corrupción».