Al menos 17 víctimas por el temporal en el norte de Nueva York
La ola de frío ártico que ha recorrido EE.UU. durante el fin de semana de la Navidad ha dejado hasta el momento 17 víctimas mortales en el norte del estado de Nueva York, la zona más afectada. La ciudad de Búfalo y sus alrededores se llevaron lo peor: una combinación de temperaturas muy bajas, una nevada violenta y crecidas en el Erie, uno de los Grandes Lagos, que baña esta región. El temporal dejó atrapadas durante días a miles de personas, en sus vehículos o en sus casas, muchas veces sin electricidad. La cifra de fallecidos «se espera que sea mucho más alta», reconoció Mike DeGeorge, portavoz de la ciudad de Búfalo. La nieve fue abundante, con acumulaciones en algunas zonas de casi un metro en tres días. Aunque esta es una zona de inviernos duros, acostumbrada a las nevadas y a temperaturas extremas, las autoridades prohibieron la circulación de coches desde el viernes, cuando llegó el temporal. Algunos hicieron caso omiso. Otros quedaron atrapados en sus casas, sin suministro eléctrico, una situación que afectó a 1,5 millones de personas en todo EE.UU. el viernes pasado. El domingo por la noche, todavía quedaban unos 15.000 clientes sin luz en la región de Búfalo y había personas que seguían atrapadas en sus coches desde el viernes. «Ha sido una tormenta épica, de esas que pasan una vez en la vida», lamentó la gobernadora del estado, Kathy Hochul. Las autoridades efectuaron 500 operaciones de rescate, pero no fue suficiente para evitar víctimas mortales. Varias fallecieron atrapadas en sus coches; una apareció muerta en la calle; tres de ellas, de fallos cardiacos mientras trataban de limpiar la nieve en sus casas; y otras tres, porque los servicios médicos no pudieron atender a tiempo emergencias, ante la situación de las calles. La situación fue tan complicada que hubo que rescatar a los rescatadores. «Tuvimos que salvar a bomberos, a policías, a personal de emergencias», dijo Mark Poloncarz, regidor del condado de Erie, en el que se encuentra Búfalo. Se espera que la Administración Biden firme una declaración de desastre para la zona, la que más ayuda necesitará en el país después de un fin de semana de Navidad desbaratado por la ciclogénesis explosiva que ha asolado el país con temperaturas extremas. Después de las abundantes cancelaciones de vuelos desde el viernes, este domingo todavía se quedaron en tierra 3.500 vuelos, en pleno retorno de los estadounidenses después de la celebración de las fiestas.