Lorca, a disposición del lector en la Cañada Real
La literatura no es un salvífico en sentido estricto. O sí. La literatura, en todo caso, redime, enseña, pone ante el espejo al ser de las cosas y de las causas. Hay evasión, lógico, pero también victoria. Como en la película de Stallone y Pelé. En el sector VI de la Cañada Real, donde las torres vallecanas son una perspectiva lejana a lo Antonio López, los libros abrigan, que decía el poeta. Por eso, la Asociación de Desarrollo Integral El Fanal junto al Ayuntamiento de Madrid han preparado un ambicioso proyecto titulado 'Fomento en la lectura en la Cañada Real'. En el local, bajo un cartel añoso de Cáritas y una puerta abierta con una cancela que suena quejosa, se penetra en un mundo nuevo. Un mundo más allá del acontecer de la Cañada, que serpentea entre buscavidas barbados, policías que van al «cogollo» con miedo y casetones improvisados a los que llaman 'kioscos', en carteles y en la jerga. Mas, sobre todo esto, hay una biblioteca que es un centro social, una guardería, un taller de animación de lo que sea y un faro de costa. Así al menos lo cuentan Irene Pérez y Rocío Díaz, que se enfrentan a los elementos, al infierno climatológico y al otro, en su centro donde rememoran la anécdota de que un chaval se partió un brazo, hay que suponer que subido a las cumbres de las estanterías. Y que ellas le dieron las primeras curas antes del médico. Noticia Relacionada estandar No Un muerto y cinco heridos en el incendio de una casa en la Cañada Real Carlos Hidalgo El fuego se ha iniciado en el acceso a la vivienda, por lo que ha habido que rescatar a las víctimas por las ventanas Tratamos de favorecer «el afecto y el acceso a la cultura». Y lo comentan orgullosas, porque los libros no hay que meterlos con calzador, sino con cariño. «Llega un chaval y lo asesoramos, y sí, los libros los devuelven si esa es la siguiente pregunta». El reportero calla, ve y cuenta lo que ve: una alfombra blanda precedida de una ludoteca como de preescolar (la educación obligatoria principia a los seis años), y la ludoteca precedida, a su vez, de una estantería que bajo el lema de literatura juvenil mezcla un atlas de anatomía humana y a ' Gabito' García Márquez , que se ve que en los colegios es lectura obligatoria y temprana. Como Federico García Lorca. De Picasso al manga Arriba, cómics japoneses de esos que dibujan al asiático tipo con los ojos grandes y flequillo y, a su frente, Gloria Fuertes en todas sus facetas: una biografía ilustrada y sus obras completas. En esa misma colección Pablo Picasso , con su jersey habitual a rayas en la cubierta. Más allá, el dato es el dato. 969 ejemplares donados por la librería Jarcha de Vicálvaro, Deriva de Carabanchel, y Muga de Vallecas. Y una dotación consistorial de 20.000 euros para adquirir más volúmenes. Sumemos los talleres de animación, los cuentacuentos, y a los 189 lectores a los que, sin sangre, entra y entrará la letra. «La biblioteca más cercana está a tres cuartos de hora» Irene Pérez En el espacio pudiera hacer frío o calor, pero para leer como se debe cuentan con calefactores, ventiladores, aunque las paredes, donde cuelgan tebeos realizados por los lectores, dan ese calor de hogar. Al fondo, insistimos, las torres vallecanas y un paraje de alcores. «Aparte del transporte escolar, la biblioteca más cercana está a tres cuartos de hora, andando y a buen ritmo». Suena un xilófono, y dicen que en el recinto, con colecciones para Infantil, Primaria y Juvenil (hay que categorizar), reina una paz envidiable. Cierran a eso de las 19.30 o las 20.00, que tampoco, explican, van a limitar que se termine un párrafo, un capítulo, un poema. Y es que hay juegos de mesa, colchones, rincones para pensar y por ahí seguido. Es un «sector de vulnerabilidad social», de «falta de servicios y de infraestructuras». Aunque la voluntad lo puede todo. El Área de Gobierno de Cultura, Turismo y Deporte concedió 92.500 euros para el proyecto, lo que, fuentes municipales cifran como el «100% del punto de lectura». MÁS INFORMACIÓN noticia No La Cañada Real cumple más de 900 días a oscuras noticia No Madrid alberga la reinterpretación artística de 'La Divina Comedia' con joyas de Percossi Papi Pero la vocación lectora de la zona tiene su historia, su tiempo, su fecha. Khadia Ajahiou, bibliotecaria, Paola Calvete que sueña talleres para animar a la prosa, e Irene Pérez, que coordina, vuelven a explicar que bajo el frontispicio de la Literatura, y teniendo internet, favorecen desde búsqueda de empleo a citas médicas o el silencio que necesita un estudiante. Sorprende que no pidan que no se hable del estigma de la zona: acaso se asume, lo asumen, y, contra él, trabajan a base de páginas y de pies de páginas.