Las batallas que peleó Alejandra Tigre Jiménez fueron más difíciles abajo del ring, pues la boxeadora puso el nombre de México en los libros de historia de este deporte al ser la primera campeona mundial de peso completo del país, pero eso no fue suficiente para ganarse un lugar dentro de la industria. Alex sufrió de homofobia y machismo, situaciones que la hicieron dar un paso al costado y encaminarse al retiro. “La verdad es que me orillaron a eso y es que, si no lo hubiera decidido en ese momento, ellos iban a provocar que sucediera. Sé la razón, mas no la logro entender”, comentó en entrevista con MILENIO-La Afición. Cambio de rumboHacerse a la idea de cambiar el rumbo del proyecto de vida que tenía no fue fácil, pero trabajó para salir adelante.“Siempre trato de mantenerme fuerte, de ser una persona que no se deja vencer por ninguna circunstancia. No me gusta estar triste, no me gusta estar mal y tampoco me gusta que la gente o mi gente me vea mal; sin embargo, sí llegó un punto en el que me veía sin rumbo y si no es por mi esposa, por mi familia, mis hijas y porque tomé terapia, no sé qué hubiera sucedido”, reveló la ex pugilista. “Me perdí totalmente. Me sentí desencajada, tratando de encajar en otros lugares, de desaparecer y al mismo tiempo hacerme notar. Tenía muchísimo coraje, tenía mucho enojo, claro. Estaba con muchísima tristeza e impotencia”, agregó. Un tema complicadoEl deporte vive todavía de muchos estereotipos, discriminación por la orientación sexual, los pagos no son igualitarios entre hombres y mujeres, y son ellas quienes deben demostrar más sus capacidades. “La homofobia sigue siendo un tema complicado todavía en nuestra sociedad. Las mentes pequeñas hacen ese tipo de cosas, afectan a terceros. Como atleta, como figura pública, como persona LGBT, como madre, ellos hicieron una bolita de papel y la tiraron y dijeron: ‘esa lesbiana masculina no la queremos aquí’”, dijo. Explora otros rumbosHoy, la ex boxeadora se dedica a entrenar a otros, enseñar lo que aprendió en su carrera y de alguna manera continuar con ese proceso que le fue cortado de tajo. “La vida da muchos giros y yo siempre he creído que las cosas pasan por algo. Ahorita estoy entrenando para hacer estas competencias que se llaman HyRox y me gusta muchísimo. Estoy explorando otra parte, no como profesional, es como un hobby, y dar entrenamientos, la verdad es que me está gustando muchísimo el poder transmitirle a la gente que el ejercicio es vida, el cambio de hábitos, el cómo el deporte en general cambió mi vida”, comentó. Aunque la nostalgia llega a ella cuando piensa en lo que no fue, trata de dejarle un mensaje positivo a las nuevas generaciones. “Trato de ver la luz al final del camino. Creo que hay gente más competente que a lo mejor puede hacer un cambiecito en pro de las mujeres. Deja tú de si eres lesbiana, bisexual, trans, lo que sea, estamos hablando en pro del deporte y en pro de las mujeres”, señaló.“Decirles que sí, que sí les va a costar un chorro y que como mujer te va a costar no al doble, 10 veces más llegar a donde va a llegar un hombre, pero al final se vive una sola vez y si no vives haciendo lo que te apasiona, entonces no encuentro el sentido de la vida. Y eso es lo que les digo: ‘si es tu pasión, adelante’”, expresó.MGC