Booster 2025: catalizador que enciende la innovación en salud
En un país donde la innovación en salud muchas veces tropieza antes de salir del laboratorio, iniciativas como el INCIDE Pharma & Health Tech Booster by New Genesis 2025, de la Fundación INCIDE, son más que un programa: son un acelerador del futuro. Liderado por Diego Ocampo Gutiérrez de Velasco, presidente de la Fundación, este proyecto está diseñado para tender puentes entre la ciencia, la industria y el capital, con un objetivo claro: que las mejores ideas en salud y biotecnología no se queden en el papel, sino que lleguen al mercado y mejoren vidas.
La propuesta es ambiciosa y realista a la vez. INCIDE no solo identifica proyectos prometedores, sino que les ofrece acompañamiento estratégico, mentoría de alto nivel y, lo más importante, acceso directo a ocho de las principales farmacéuticas asociadas a la fundación. En un ecosistema donde la ruta regulatoria, la propiedad intelectual o la estrategia de negocio suelen ser cuellos de botella, el Booster 2025 se convierte en una especie de GPS que guía a investigadores, startups y emprendedores desde la fase temprana hasta la consolidación o transferencia tecnológica.
Se trata de una plataforma probada: en su primera edición, 14 proyectos fueron seleccionados de entre más de 70 propuestas de 11 países. Cinco de ellos ya están en proceso de levantar capital, con montos que van desde un millón de dólares (mdd) hasta acuerdos en Estados Unidos por 40 mdd. El mensaje es claro: cuando se juntan ciencia sólida, acompañamiento experto y conexiones estratégicas, la innovación florece.
Este año, el programa se renueva con tres modalidades que responden a las distintas etapas de madurez de un proyecto: etapa temprana, para quienes tienen resultados iniciales de laboratorio; consolidación, para investigaciones preclínicas con bases regulatorias; y transferencia de tecnología, para desarrollos listos para licenciar, codesarrollar o escalar clínicamente. A ello se suma un formato más intensivo —seis semanas de trabajo concentrado— y un enfoque reforzado en el músculo financiero, porque la ciencia sin modelo de negocio rara vez sobrevive.
La relevancia de esta iniciativa va más allá del sector salud. Habla de un modelo de colaboración en el que compiten y cooperan a la vez laboratorios, universidades, empresas, consultoras y gobierno. Instituciones como el Tec de Monterrey y el Instituto de Biotecnología de la UNAM, muestran que el país tiene capacidad instalada, talento y visión para generar biotecnología competitiva a nivel global, solo hacía falta el catalizador, y eso es justo lo que representa INCIDE.
La innovación es posible si se alinean voluntades y recursos. Hoy, la invitación está abierta para que más investigadores y emprendedores se sumen. Porque detrás de cada molécula, cada dispositivo y cada solución hay una oportunidad de salvar vidas y generar riqueza. Y si algo deja claro Fundación INCIDE es que, con el impulso correcto, la ciencia mexicana no solo puede competir: puede liderar. Enhorabuena.
Sala de Urgencias
- En el foro matutino presidencial recién se anunciaron nuevas inversiones en México por parte de cuatro farmacéuticas, entre ellas Carnot Laboratorios, socio de INCIDE, lo que envía una clara señal de confianza en el país como polo de innovación y producción en salud. Más allá de las cifras, el anuncio confirma que México es visto como un socio estratégico en investigación, desarrollo y transferencia tecnológica, en plena sintonía con el impulso que representan iniciativas como el Booster 2025.