Este barrio catalán decora sus calles de una forma única en agosto para sus fiestas
Descubre cómo las calles del barrio de Gracia se transforman en un espectáculo visual único para celebrar su Fiesta Mayor con decoraciones
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Cada año, en el mes de agosto, el barrio de Gracia, en Barcelona, se convierte en un lienzo gigante donde los vecinos transforman sus calles en auténticas obras de arte. La Fiesta Mayor de Gracia, que tiene lugar desde 1817, es una de las celebraciones más emblemáticas de la ciudad, y una de las tradiciones más esperadas es el Concurso de Calles Decoradas. Este evento ha evolucionado a lo largo del tiempo, convirtiéndose en una de las mayores expresiones de creatividad comunitaria en España.
El origen de la Fiesta Mayor de Gracia
La Fiesta Mayor de Gracia tiene su origen en 1817, cuando los habitantes del antiguo pueblo de Gracia decidieron celebrar el regreso de la imagen de la Virgen María a su altar. Desde entonces, las festividades han evolucionado, pero siempre han mantenido su espíritu de comunidad y celebración popular.
La primera edición del concurso de calles decoradas se celebró en 1920, y desde entonces se ha convertido en el evento central de la fiesta. Aunque la guerra y la dictadura pusieron en pausa esta tradición, a partir de los años 80 comenzó a revivir con fuerza, y hoy, las calles decoradas son uno de los mayores atractivos del verano en Barcelona.
Las calles se convierten en verdaderas obras de arte
Una de las características que hace única la Fiesta Mayor de Gracia es la decoración artesanal de las calles del barrio. Los vecinos y asociaciones se organizan durante todo el año para crear las decoraciones más impresionantes, utilizando materiales reciclados y aprovechando la creatividad colectiva. Las temáticas de las decoraciones varían cada año y van desde recreaciones de mundos fantásticos, homenajes a películas o representaciones históricas.
Cada calle tiene su propia personalidad, y los visitantes se ven envueltos en un recorrido visual único mientras caminan por el barrio. Las calles no solo se decoran con adornos, sino que a menudo incluyen figuras, estructuras y paisajes que convierten el recorrido en una experiencia inmersiva.
La competencia sana que despierta la creatividad
El Concurso de Calles Decoradas ha generado una competencia sana entre las calles de Gracia, lo que ha dado lugar a decoraciones más elaboradas y espectaculares cada año. La creatividad no tiene límites: algunos optan por temas inspirados en la cultura pop, otros en temas sociales, mientras que hay quienes se atreven a reconstruir escenas de la historia. La competencia también incluye el Concurso de Balcones y Portaladas, en el que los comercios del barrio también se suman a la fiesta, aportando su propio toque decorativo.
Un compromiso con la sostenibilidad
En los últimos años, se ha notado un aumento del uso de materiales reciclados en las decoraciones, lo que refleja un compromiso creciente de los vecinos por hacer que las festividades sean más sostenibles. Desde papel reciclado hasta plásticos reutilizados, las decoraciones de Gracia no solo sorprenden por su belleza, sino también por el respeto al medio ambiente. Es una forma de que la comunidad celebre no solo su tradición, sino también la importancia de cuidar el planeta.