Rob Jetten, el joven liberal demócrata que venció a Wilders en las urnas en Países Bajos
El partido D66 del político de 38 años Rob Jetten está prácticamente empatado con el Partido por la Libertad de extrema derecha de Geert Wilders tras las elecciones del miércoles, lo que significa que podría convertirse en el primer ministro más joven de la historia de Países Bajos.
Con el 98% de los votos escrutados, el partido de Jetten suma 26 escaños en el Parlamento holandés de 150 escaños, un aumento de 11 con respecto a las elecciones anteriores. Hasta la mañana de ayer, el D66 empataba con el Partido por la Libertad (PVV), que también se proyectaba que obtendría 26 escaños. La diferencia entre ambos era de poco más de 20.00 votos a nivel nacional.
Aunque se prevé que Jetten se convierta en primer ministro, Wilders ha dicho que su partido hará «todo lo posible» para evitar que D66 tome la delantera en las conversaciones de coalición, mientras no esté claro quién es el partido más grande. La mayoría de los partidos, incluido D66, han descartado gobernar con el PVV. Jetten, que se mostró muy animado durante la campaña electoral, ha dado un giro radical a su partido tras un comienzo poco prometedor como líder en 2023. En las elecciones de ese año, su partido consiguió solo nueve escaños.
Conocido en su día como «Jetten el Robot» por la forma rígida en que respondía a las preguntas, el joven político, que fue ministro de Clima en el último Gobierno del ex primer ministro Mark Rutte, conectó con los votantes esta vez gracias a su mensaje positivo. Fue una figura habitual en la televisión durante la campaña electoral, llegando incluso a aparecer en un concurso pregrabado llamado «La persona más inteligente».
En un guiño al lema «Yes we can» de Barack Obama, Jetten basó su campaña en la frase «Het kan wel» («Es posible»). Jetten hizo una intensa campaña por el regreso a la política «progresista», centrándose en la energía verde para mantener bajos los costes energéticos, la construcción de ciudades para abordar la crisis de la vivienda y el alivio de la presión sobre la sanidad priorizando la prevención de enfermedades.
En vivienda, el político centrista dijo que quería construir 10 ciudades nuevas y que la reducción de la burocracia permitiría terminar 100.000 viviendas nuevas al año. Mientras tanto, en el controvertido tema de la migración, Jetten prometió aumentar el gasto en programas de integración y abordar la inmigración ilegal permitiendo que se presenten solicitudes de asilo desde fuera de la UE.
De ser elegido, Jetten afirmó que la política de su Gobierno sería garantizar que quienes huyen de la guerra o la violencia se integraran en la sociedad neerlandesa aprendiendo el idioma. También prometió que se deportaría a los elementos indeseables. El líder del D66 también arremetió con éxito contra Wilders. Jetten acusó a su rival de extrema derecha de «secuestrar» la identidad neerlandesa y «sembrar la división».
