¿Quién es Rixi Moncada, la aspirante oficialista que busca profundizar la refundación del Estado en Honduras?
Rixi Moncada, nacida el 13 de febrero de 1965 en Talanga, Honduras, es la candidata presidencial por el Partido Libre para las elecciones generales de 2025. Tiene experiencia en cargos públicos en el Gobierno de Honduras y, con un enfoque orientado a transformar la economía del país, busca ganarse la preferencia de los votantes.
Moncada, en diversas ocasiones, ha criticado el sistema financiero de Honduras, "capturado por la élite integrada por 25 grupos económicos y 10 familias", y sostiene que sus políticas buscarán democratizar la economía para contrarrestar este control. Además, plantea la necesidad de regularizar y cancelar concesiones que resulten perjudiciales para el país.
PUEDES VER: Jueza de EE.UU. desestima casos contra exjefe del FBI y fiscal de Nueva York, enemigos de Donald Trump
Propuestas de Rixi Moncada
Moncada propone, principalmente, financiar a las MIPYMES mediante un sistema con 0% de interés para las micro, pequeñas y medianas empresas, a fin de impulsarlas como motor principal de la generación de empleo.
La candidata del Partido Libre también busca defender a las instituciones públicas, como la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), a las que considera patrimonio y herencia de la nación, y que deben ser protegidas de cualquier privatización o sometimiento a intereses externos.
En los ámbitos de educación, seguridad ciudadana y programas de apoyo, propone una mejora a nivel nacional que priorice el bienestar de las próximas generaciones mediante una transformación estructural desde el Estado y la construcción de un sistema equitativo para todos.
Los otros candidatos en Honduras
Aparte de Rixi Moncada, existen otros candidatos importantes en Honduras. Nasry “Tito” Asfura se presenta como una alternativa relevante para competir por la presidencia; por otro lado, se encuentra Salvador Nasralla, quien mantiene una postura marcada por su discurso anticorrupción.
Las elecciones en Honduras proyectan una batalla electoral polarizada, con campañas centradas en la lucha contra la corrupción, la gestión económica y la defensa de la soberanía nacional. El resultado dependerá en gran medida de cómo los candidatos ejecuten sus próximos movimientos.
