La estrategia de autodespido definitiva para renunciar a tu trabajo y optar a paro con indemnización, según un experto
En el entorno laboral español, los despidos, la prestación por desempleo y las indemnizaciones son elementos fundamentales para proteger los derechos de los trabajadores. Sin embargo, su funcionamiento no siempre es sencillo ni transparente, lo que genera dudas y complicaciones entre quienes deben enfrentarse a estas situaciones. Los despidos pueden ser objetivos, disciplinarios o por causas económicas, técnicas o organizativas, y cada uno de ellos tiene implicaciones diferentes en cuanto a indemnización y derecho a paro.
Percibir la prestación por desempleo no siempre es inmediato, ya que depende de cumplir ciertos requisitos como haber cotizado un tiempo mínimo, estar inscrito en el servicio público de empleo y encontrarse en situación de desempleo involuntario. Las indemnizaciones, por su parte, dependen de la forma en que finaliza la relación laboral y de los posibles incumplimientos de la empresa. Esta complejidad hace que muchos trabajadores necesiten asesoramiento para entender exactamente qué les corresponde y cómo reclamarlo.
A pesar de la aparente dificultad, muchos expertos señalan que existen estrategias legales que permiten a los empleados acceder a estas prestaciones sin salirse del marco normativo. Estas recomendaciones incluyen conocer en profundidad los derechos recogidos en el Estatuto de los Trabajadores y documentar cualquier irregularidad por parte de la empresa. Uno de los expertos más conocidos en redes sociales que ofrece este tipo de información es el @empleado_informado, profesional del derecho laboral que se ha hecho popular por su contenido divulgativo en favor del bienestar de los trabajadores dentro de la empresa.
El "autodespido" para conseguir paro más indemnización
Existen dos casos principales en los que un trabajador puede acceder a la prestación por desempleo después de abandonar su empresa de manera voluntaria. En el primero, se puede solicitar paro más indemnización siempre que se vulneren derechos fundamentales recogidos en los artículos 50, 41 y 40 del Estatuto de los Trabajadores. Entre estos derechos se incluyen cambios de horarios, cambios de jornada, modificaciones de funciones, alteraciones salariales, traslados de lugar de trabajo, falta o retraso en los pagos, pagos en negro, ausencia de cotización y sobrecarga de trabajo.
Esta estrategia es conocida como autodespido y permite al trabajador protegerse frente a malas praxis que se producen en muchas estructuras laborales. Al documentar estas vulneraciones y acudir a la vía legal correspondiente, el empleado puede reclamar tanto la indemnización como la prestación por desempleo, convirtiendo la salida voluntaria en una medida de defensa de sus derechos laborales. El autodespido requiere conocimiento legal y, en muchos casos, el acompañamiento de un profesional para garantizar que se cumplen los requisitos.
Otra estrategia para optar a la prestación por desempleo
El segundo caso se basa en una estrategia que algunos trabajadores utilizan para asegurar la percepción del paro tras una salida voluntaria. "Mucha gente lo que hace es irse y coger un contrato temporal muy corto, generalmente a través de ETT, y usar esa extinción cuando termina el contrato para cobrar el desempleo con todo el periodo de cotizaciones acumulado anteriormente", explica el experto. Esta práctica permite aprovechar la historia laboral acumulada y convertirla en derecho a prestación, sin vulnerar la legislación vigente.
Ambas estrategias reflejan cómo los trabajadores pueden hacer valer sus derechos dentro del marco legal y proteger su situación económica frente a decisiones empresariales adversas. Conocer las opciones disponibles y actuar de manera informada es clave para no perder prestaciones y garantizar una transición más segura entre empleos. La divulgación de profesionales del derecho laboral contribuye a que los trabajadores comprendan sus derechos y adopten estrategias adecuadas sin necesidad de recurrir a medidas ilegales o riesgosas.