El PSOE responde al 'caso Ábalos' con un informe que descarta financiación ilegal y acredita que los pagos en metálico iban apoyados en recibos

El PSOE responde a la polémica generada por la investigación judicial sobre todas las liquidaciones de gastos que cargos públicos y trabajadores pasaron al partido por comidas, hoteles o kilometraje en los últimos siete años con un informe técnico que acredita que el dinero con el que se abonaron esas liquidaciones procedía de su cuenta oficial y que esos pagos en metálico estaban respaldados por recibos. El documento, encargado a dos profesores de la Universidad Autónoma de Madrid, disipa la sospecha sobre la financiación irregular de los socialistas alentada por el PP, aunque asume que el PSOE pagó algunos gastos “improcedentes” que la Secretaría de Organización que dirigía José Luis Ábalos justificó con facturas. 

El informe, de 108 páginas, analiza el funcionamiento de la caja del PSOE en el citado período, así como los pagos por valor de 126.858 euros abonados en metálico al “Equipo de Organización” entre 2017 y 2020, cuando ese departamento estaba dirigido por Ábalos, ahora en prisión. Según el informe, el PSOE llegó a manejar en su caja ese período 940.388 euros en metálico. Es un dinero que procedía “fundamentalmente” de las reposiciones de efectivo realizadas desde la cuenta operativa del partido en el BBVA, tal y como acreditan los justificantes bancarios. Esa información ya fue aportada al Tribunal Supremo por el partido el pasado octubre. 

La investigación realizada ha detectado algunos “ingresos atípicos” en esa caja por una suma total de 7.283 euros. Se trata, dice el informe, de “operaciones esporádicas y plenamente identificadas”. A saber: ventas de merchandising, los ingresos obtenidos tras llevar a empresas de chatarra material inservible o 1.000 euros percibidos en 2023 por diez décimos del número 89.374 premiados en la Lotería de Navidad del año anterior. 

Los expertos sostienen que la revisión realizada “muestra un sistema de caja coherente, cerrado y verificable, en el que todas las entradas de efectivo tienen un origen bancario o responden a ajustes de anticipos, y todas las salidas están correctamente documentadas”. “No se detecta movimiento alguno que pueda considerarse ajeno al circuito ordinario de tesorería, ni indicio de fondos no declarados o no trazados”, concluyen el catedrático Félix Vega y el profesor César Martínez, especializados en Derecho Financiero y Tributario.  

Respecto a las salidas de efectivo, el informe apunta que los importes contabilizados “se ajustan al funcionamiento ordinario del sistema de anticipos y reembolsos”. Ese sistema consiste en que la persona adelanta un gasto vinculado a una actividad del partido, presenta la correspondiente liquidación y se le reintegra el importe justificado. Eso explica, prosigue el análisis, que el partido no haya practicado retención de IRPF, pues no se trata de rendimientos del trabajo ni de la actividad profesional, sino de “simples reembolsos de gastos soportados en interés de la organización”. 

Los expertos han analizado una muestra consistente en 18 de las 190 hojas de liquidaciones de gastos que Ábalos, Koldo García y el equipo de Organización pasaron al partido entre 2017 y 2020. Cada una de esas hojas incluye decenas de tickets y facturas, por un importe total cercano a los 65.000 euros. Se han analizado todas las liquidaciones iguales o superiores a 2.000 euros, aunque en algunos casos había un “número relevante” de comprobantes ilegibles total o parcialmente, debido al desgaste de la tinta por el paso de los años.

Gastos “notoriamente improcedentes”, en “pocas ocasiones”

La “mayoría” de esos gastos corresponden a “gastos de restauración usuales: menús, bebidas y cafés” realizados en restaurantes “situados en el eje Madrid-Valencia”, precisamente los enclaves por los que se movía Ábalos, que es diputado por Valencia, ahora suspendido de sus funciones tras decretar el juez prisión provisional para el extitular de Transportes. Los expertos constatan que en la práctica totalidad de los comprobantes de gasto no consta el destinatario de esos abonos. Pero, en los que aparece, figuran “de forma mayoritaria” Ábalos, Koldo García y Eduardo Cantos, chófer del exministro. El informe destaca que “en pocas ocasiones constan gastos notoriamente improcedentes”, como menús infantiles en restaurantes. 

El análisis realizado también constata que en los años 2017, 2018 y 2019 son “reducidos” los gastos que superan el umbral de 60 euros por comensal, por lo que el informe no considera que puedan ser gastos “suntuarios o excesivos”. Sin embargo, el examen de los gastos de 2020 sí refleja que una de cada cuatro comidas superaron ese importe. El informe toma como referencia la cifra de 60 euros por comensal dado que la dieta de manutención para los funcionarios del Grupo A1 es de 53,54 euros. Esa cifra no ha sido actualizada desde 2005, por lo que los autores optan por redondearla a los 60 euros.

Así, el informe recoge, por ejemplo, una factura de “un menú” en la marisquería La Chalana de Madrid por un importe de 332 euros. Además, ese día se registraron otras dos facturas seguidas en el mismo día y en el mismo restaurante “cuya explicación no resulta evidente”. La Chalana, una marisquería madrileña cercana al Santiago Bernabéu, a unos 10 minutos andando del Ministerio de Transportes, era la base de operaciones de Ábalos y Koldo García. 

En ese mismo año figuran otros recibos de comidas que rondan los 300 euros para tres comensales en restaurantes ubicados en las inmediaciones del Ministerio, así como en el Barrio de Salamanca de Madrid. También consta un recibo de “un menú del día” en un restaurante de Aranda de Duero por un importe de 193 euros. Es un gasto “extraordinario” y que “no se compadece con el coste por comensal propio de un menú del día habitual”, dice el informe.

El PSOE cambió a partir de 2020 el procedimiento de liquidación de gastos y pasó a efectuar casi todos los abonos por vía bancaria, a excepción de algunos de los gastos adelantados. El informe acredita que, a pesar de ello, el PSOE siguió manejando elevadas cantidades de efectivo a partir de esa fecha para gastos distintos a los de representación que pasaban sus cargos orgánicos.

Fuentes socialistas explican que se trata de la primera parte de la “auditoría externa” a la que Pedro Sánchez se comprometió el pasado junio, cuando salieron a la luz las grabaciones en las que sus dos últimos secretarios de Organización aparecían hablando del reparto de mordidas. La segunda parte, indican estas fuentes, analizará en detalle si esos gastos que Ábalos y su asesor Koldo García pasaron al partido —en ocasiones en nombre de otros miembros del equipo de Organización— corresponden con actividades propias de la formación.