Muere a los 44 años Dustin Diamond, estrella de «Salvados por la campana»

Dustin Diamond, el actor que dio vida a Screech en la popular serie de los noventa «Salvados por la campana», ha fallecido este lunes a los 44 años. Había ingresado el pasado 8 de enero en un hospital de Florida para buscar la causa de unos dolores físicos que le habían comenzado a apremiar en los últimos meses. El portal sensacionalista «TMZ» desveló que se trataba de cáncer. Otros medios, como «Variety», no aclaran una causa concreta de la hospitalización, aunque señalan que los médicos le habían realizado pruebas para determinar si se trataba de algún tipo de cáncer. La muerte del actor, rostro reconocido de la televisión americana, donde había participado también en realities de famosos, ha sorprendido al mundo del espectáculo. Su nombre también era habitual de las revistas del corazón, siempre relacionado con polémicas desde su salto de las series a los «shows». Dustin Diamond Desde que terminó «Salvados por la campana», Diamond encadenó controversia tras controversia. Después de pasar por la cárcel en varias ocasiones, fue uno de los pocos ausentes en el reboot de «Salvados por la campana» que estrenó Peacock el pasado mes de noviembre. De hecho, en la serie-reencuentro, sus compañeros lo justifican como que «está viviendo en la Estación Espacial Internacional». Inolvidable papel Samuel «Screech» Powers (Dustin Diamond) es, a buen seguro, uno de los personajes que con más cariño recordamos del panorama seriéfilo de los 90. Era el joven «graciosete» y empollón que amenizaba las tardes con sus meteduras de pata y su eterno amor por Lisa (Lark Voorhies) en «Salvados por la campana». El personaje se convirtió, sin embargo, en uno de los actores más polémicos tras el final de la serie. En 2006, por ejemplo, Screech protagonizaba un vídeo pornográfico titulado «Saved by the smell» y en el que aparecía con dos prostitutas. Diamond ha vivido varios años rodeado de polémica, sobre todo tras la publicación de su libro «Behind the bell» («Tras la campana») y en el que el actor se dedica a desvelar los «trapos sucios» de sus compañeros tras las cámaras. En él, el actor asegura que el resto de actores le marginaban en las grabaciones y en su venganza les acusaba de la vigorexia de López, y tachaba de ególatra a Gosselaar. Además, Diamond desvela discusiones subidas de tono e incluso relaciones sexuales y tríos entre el reparto.