'Amaia', asesina múltiple y símbolo, junto a su pareja 'Txapote', de los etarras que jamás se han arrepentido
Si el Gobierno de Pedro Sánchez quería buscar una traca final, un símbolo para poner fin a la política de dispersión de los presos de ETA, no ha podido hacerlo mejor: el acercamiento a una prisión del País Vasco de Irantzu Gallastegui, Amaia, asesina entre otros de Miguel Ángel Blanco y pendiente aún de ser juzgada por el crimen perpetrado en 1998 en Rentería (Guipúzcoa) del concejal del PP Manuel Zamarreño , supone beneficiar a una de las terroristas más sanguinarias, con cientos de años de condena a sus espaldas, sin que además -como buena parte de este colectivo, por cierto- haya pedido perdón ni resarcido a sus víctimas. El 9 de marzo de 1999 fue detenida en París Irantzu Gallastegui en una operación, resultado de investigaciones de la Guardia Civil, en la que también cayó José Javier Arizkuren Ruiz, Kantauri , entonces jefe de los comandos de ETA, y otros cuatro pistoleros. Ya entonces se acusaba a esta mujer y a su pareja, Francisco Javier García Gaztelu, Txapote , de ser dos de los tres terroristas que en julio de 1997 habían secuestrado y asesinado tres días después al concejal popular de Ermua. Arnaldo Otegi , el «hombre de paz» según José Luis Rodríguez Zapatero, y hoy fiel aliado del Gobierno de Sánchez, calificó aquella operación policial como una « apuesta de guerra de los Estados español y francés«. Y eso que entonces se sospechaba que además de en el brutal asesinato de Blanco también participó, junto con su pareja, en el del dirigente socialista vasco Fernando Múgica . Fue condenada a 82 años por esos hechos. Noticia Relacionada estandar No Otegi da por segura para este mes la última tanda de traslados de etarras al País Vasco Presume de las buenas expectativas de Bildu para optar a alcaldías como San Sebastián, Vitoria o Pamplona El historial criminal de «Amaia», que en buena medida compartió con su novio «Txapote», pone los pelos de punta. El funcionario de prisiones Francisco Javier Gómez Elósegui también está entre sus víctimas mortales, lo mismo que José Ignacio Iruretagoyena , concejal del PP de Zarauz, que en 1998 cayó a manos de esta pareja unida por la sangre y el odio, y que ahora van a volver a reunirse en el País Vasco. Si alguien sospecha que 'Amaia' ha cambiado, que la derrota de ETA la ha llevado hasta posturas más conciliadoras, está equivocado: el último mensaje que se le conoce es una carta a Etxerat , la asociación de apoyo a presos de la banda, en la que pedía a los dirigentes de ese colectivo que dejaran de entrar en contacto con ella o con su familia y les reprochaba «las formas y la línea política de actuación mostrada». Tanto 'Amaia' como 'Txapote', que han sido padres de dos hijos en prisión, abogan por retomar el terrorismo. En una conversación en la cárcel, se lamentaban del fin de ETA y esperaban que «con el tiempo» se creara una orragización parecida para ocupar «el vacío» dejado por la banda. También han mostrado su indignación porque parte de la ziquierda abertzale deslegitimara la violencia, y porque en su día se prestara demasiada atención a los 'ocho de Alsasua' , los jóvenes que fueron condenados por golpear en un bar a una pareja de guardias civiles y a sus parejas. El primer pago de Pedro Sánchez a Bildu por su apoyo para ocupar el sillón del Palacio de la Moncloa era el acercamiento de todos los presos de ETA al País Vasco y Navarra antes de que acabase la legislatura, y el presidente del Gobierno ha cumplido; para la siguiente, el precio es aún más ambicioso: que en los próximos cuatro años salgan a la calle todos ... Después de lo sucedido en los últimos años, y si hay continuidad al frente del Ejecutivo, ya nadie apuesta por0 que ese escenario sea imposible.