La historia de la joven que huyó de Corea del Norte para encontrar a su madre tras toda una vida separadas
El río Yalu es la frontera que separa gran parte de Corea del Norte y China. Para muchos ha sido durante años una de las únicas vías de huida del país. Songmi Park fue una de las últimas que ha conseguido llegar a Seúl, ya que escapó a finales de 2019, poco antes de que el líder Norcoreano, Kim Jong Un , ordenara cerrar las fronteras a causa de la pandemia y disparar a quien intentase cruzar. La joven, que tenía apenas 18 años cuando huyó, emprendió su viaje para buscar a su madre , a quien no veía desde hacía 10 años, ya que permanecían separadas desde los 4 años. Noticias Relacionadas estandar No Corea del Norte confirma el lanzamiento de un dron submarino diseñado para «crear un tsunami radioactivo» Europa Press estandar Si Japón y Corea del Sur se unen contra la amenaza nuclear de Kim Jong-un Pablo M. Díez Tal como ha contado Park a la BBC, no ha sido la primera vez que ha cruzado la frontera . Cuando era una niña y tenía 4 años atravesó el río junto a sus padres. Los tres se escondieron en China, en una granja de unos familiares, pero fueron descubiertos y devueltos a Corea del Norte. Fue entonces cuando les separaron. Mandaron a sus padres a un campo de concentración del país y a ella la dejaron a cargo de sus abuelos paternos. Código Desktop "Kenapa ibu meninggalkanku?" tanya Songmi Park setelah selama 10 tahun ditinggalkan oleh ibunya di Korea Utara.
Keduanya kini telah bertemu kembali dan menetap di Korea Selatan.https://t.co/iOXpIGC8wu— BBC News Indonesia (@BBCIndonesia)
April 9, 2023 Imagen para móvil, amp y app Código móvil "Kenapa ibu meninggalkanku?" tanya Songmi Park setelah selama 10 tahun ditinggalkan oleh ibunya di Korea Utara.
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April 9, 2023 Cuatro años después, los padres de Park quedaron libres y fueron a reunirse con su hija y sus padres en una granja en Musa, muy cerca de la frontera con China. El padre de la entonces niña fue el primero en llegar, pero murió a los pocos días. Su madre , que llegó cuando su marido ya había fallecido decidió huir de nuevo , pero esta vez sola dejando a Songmi atrás. Pasaron los años y la pequeña fue creciendo mientras sus abuelos envejecían. Sólo dos años después su abuelo murió y ella se quedó cuidando con apenas 10 años de su abuela, que estaba enferma y postrada en la cama. «Mi familia fue desapareciendo uno por uno. Daba mucho miedo», relata Park a la BBC. 20.000 dólares para traer a su hija Mientras tanto, su madre, Myung-hui, había conseguido llegar a Seúl y estaba intentando traer a su hija. No obstante, no es una tarea fácil, ya que es necesario mucho dinero para superar todas las trabas administrativas y sobornar a los oficiales que pueda haber por el camino. En total, su madre pagó más de 20.000 dólares para poder pagar la huida de su hija, que fue muy parecida a la suya. Escapó por el río Yalu a China, donde cogió un autobús hacia la embajada de Corea del Sur de Laos y desde allí viajó a Seúl, explica a la BBC. En total tardó un año en llegar . La historia de Songmi es especialmente valiosa porque ha sido una de las últimas personas en logar salir del país. Tal como indica la BBC, antes de 2020, más de 1.000 norcoreanos llegaban a Corea del Sur cada año, pero durante la pandemia, la cifra se redujo a 229. Ya en 2021 sólo 67 lo consiguieron.