En los últimos días, más de 9.000 personas han sido evacuadas debido a la ola de incendios, que se ha visto agravada por la ola de calor que afecta a Grecia desde el lunes. Desde la tarde del sábado, los bomberos combaten numerosos incendios forestales en todo el país, que han obligado a evacuar de más de 5.000 personas solo en las afueras de Atenas. Según informó el portavoz de Protección Civil, Vasilis Vathrakoyiannis , los focos más importantes se ubicaban en el norte de Atenas, las islas de Eubea y Citera, la región de Mesenia (al sur del Peloponeso), y el noroeste de Creta. «El rápido avance y la peligrosidad de estos incendios, especialmente los registrados hoy, nos llevan a pensar que la situación permanecerá crítica en los próximos días», afirmó. Ante la magnitud y la dispersión geográfica de los focos, sumadas a las difíciles condiciones meteorológicas —con temperaturas que superan los 40 grados centígrados y vientos del norte de hasta 75 kilómetros por hora —, Grecia se ha visto obligada a pedir ayuda al Mecanismo Europeo de Protección Civil , solicitando seis aeronaves adicionales. El incendio, declarado el sábado por la tarde en una localidad al norte de la capital griega, avanza rápidamente y representa una amenaza para Atenas. El fuego se inició en la localidad de Drosopigí, una pequeña localidad al norte de Atenas y muy cerca del monte Parnés —zona afectada por varios incendios forestales en los últimos años—. Este incendio —uno de los que más preocupa a las autoridades griegas por su proximidad a grandes núcleos urbanos—avanza con rapidez, impulsado por fuertes vientos del norte, en dos frentes diferentes: Kryoneri Drosopigí, a unos 20 kilómetros de la capital. Las autoridades evacuaron a unas 5.000 personas, se han calcinado varias viviendas y una mujer tuvo que ser trasladada al hospital por problemas respiratorios. En la zona operan cinco brigadas de bomberos, 44 vehículos de extinción , 10 aviones cisterna y 7 helicópteros. La situación es crítica debido a las condiciones climáticas, con fuertes ráfagas de viento que están dificultando las labores de extinción. El foco de Krioneri, al norte de Atenas, amenaza la antigua finca real de Tatoi, donde doña Sofía pasó los veranos de su infancia. Está zona ya sufrió un incendio en 2012, provocando daños en el antiguo cementerio real, donde están enterrados los padres de doña Sofía y en algunos de los edificios del complejo. Mañana hay 10 regiones del país en alerta máxima por riesgo de incendios. En las últimas 24 horas, se han declarado 52 incendios forestales en toda Grecia. Cinco heridos en el incendio de Ática, entre ellos un bombero. Además de focos en la región del Ática, los bomberos combaten otros incendios declarados la tarde del sábado en las cercanías de la ciudad de Salónica –en el norte del país—, en las islas de Eubea y Citera y en el Peloponeso. En el frente de la isla de Eubea, en el norte de Atenas, al menos seis bomberos resultaron heridos y dos camiones cisterna quedaron completamente calcinados mientras combatían un gran incendio forestal en la localidad de Pissonas, cerca de la capital de la isla. A la zona, que fue evacuada, se han desplazado cerca de 150 bomberos , 28 vehículos cisterna, seis aviones y siete helicópteros. También se han evacuado localidades en Citera, en Mesenia (al sur del Peloponeso), donde las temperaturas alcanzaron los 45 grados este sábado. En el norte del país, en la región de Kozani y en las afueras de Salónica —segunda ciudad más poblada de Grecia— los cuerpos de extinción combaten dos incendios forestales de menor intensidad y que no han causado daños en viviendas. Además, desde el pasado viernes, otros dos grandes incendios permanecen activos en las regiones de Euritania, en la Grecia central y Kastoria, al norte del país, donde las lamas continúan devorado hectáreas de bosques vírgenes, aunque sin afectar a zonas habitadas. Desde el pasado martes, Grecia atraviesa una de las peores olas de calor de los últimos años, con temperaturas que superan los 45 grados en varias regiones del país. Para mitigar los riesgos para la salud pública, en la capital griega se han implementado medidas de emergencia, como el cierre de la Acrópolis durante las horas más calurosas del día y la prohibición de acceso al monte Licabeto durante todo el fin de semana. Para proteger a las personas sin hogar, equipos compuestos por trabajadores sociales, médicos y psicólogos recorren las calles de Atenas ofreciendo asistencia directa, agua fría, comida y un kit de protección contra el calor. Además, se han habilitado refugios climáticos en los principales barrios del centro y una línea telefónica que orienta sobre la prevención y el tratamiento de problemas de salud vinculados a las altas temperaturas. Según los pronósticos, la ola de calor persistirá al menos hasta el próximo lunes, cuando se espera un descenso gradual de las temperaturas.
