Los buffets cuentan con una gran legión de seguidores en España. Su popularidad se debe a su fórmula: comer una gran variedad de platos a la elección de cada uno sin la necesidad de preocuparse por su coste, ya que se paga un precio fijo. Dentro de la gran cantidad de opciones que existen, los buffets de comida china se han ganado un importante hueco en nuestro país debido a su combinación de platos tradicionales con elaboraciones más llamativas. De esta forma, pueden encontrarse platos tradicionales como el arroz tres delicias, el pollo al limón o el cerdo agridulce, pero también platos preparados al momento en un wok como verduras frescas, carnes o mariscos. Además, muchos buffets modernos incluyen secciones de cocina japonesa con sushi y platos mediterráneos o de otras culturas. En este sentido, uno de los aspectos que más curiosidad —y en ocasiones recelo— genera entre los consumidores es la procedencia de los alimentos que se sirven. Y es que muchos clientes se preguntan si los ingredientes son frescos o si llegan importados congelados desde otros países. El dueño de un buffet chino aclara este duda en el podcast 'Un chino y medio' . Durante la entrevista, realizada por los influencers Lin y Jiajun, Jiale Pan desvela distintos detalles sobre el funcionamiento de un establecimiento de esta categoría. «El sitio donde compráis los ingredientes, ¿es todo congelado que lo compráis al por mayor o dónde compráis tanta comida? », pregunta Lin al chef chino, en una ronda de preguntas sobre distintas curiosidades de los buffets chinos. Jiale Pan no tiene dudas en responder a la pregunta con claridad: « El 90% es congelado , un 5% lo hacemos nosotros y el otro 5% es fresco». En este sentido, señala que el producto fresco al que hace referencia se corresponde con la fruta, algún tipo de carne y pescado y los marinados que realizan ellos mismos. En este sentido, Jiajun se interesa por el precio de uno de los pescados más consumidos en estos establecimientos y también de los más caros: el salmón . «En aquella época te podía costar en verano 5,50 euros el kilo, el pico más alto 7,70-8 euros, pero si estamos hablando del día de hoy, he comprado salmón la pasada Navidad por 16 euros el kilo », señala. Los buffets chinos, por su propio funcionamiento, deben hacerse con una gran cantidad de producto, por lo que el desembolso de dinero es alto. En este sentido, Jiale Pan señala que el coste del género supone «un 50-55%» de la ganancia por las ventas: «No tiene que sobrepasar eso. Hay gente que lo recorta, pero cuanto más recortas, menos calidad». El chef chino desvela también durante la entrevista que los clientes más rentables son los españoles y «los que vienen en familia» , mientras que los chinos son los que dejan menos ganancias. Otro de los aspectos sobre los que se pronuncia Jiale Pan es sobre el destino del exceso de producto en estos establecimientos: «Cuando estaba yo con los socios de mis tías ellos no lo querían tirar . Ahí también entró un conflicto bastante grande. Lo querían aprovechar porque es bastante comida, pero yo lo quería tirar. Quería garantizar un mínimo de calidad», señala.