Sevilla soportó este miércoles uno de los temporales de lluvia y viento más virulentos de cuantos se recuerdan . Los 115 litros por metro cuadro que en apenas 15 horas cayeron sobre la capital hispalense provocaron centenares de incidencias repartidas por todos los barrios que colapsaron la ciudad y a las que se sumaron atascos interminables, calles anegadas y un listado casi incalculable de daños materiales. Horas después del caos, los sevillanos se afanan en recuperar la normalidad con la duda de si se podría haber hecho algo más por parte de las administraciones para evitar lo ocurrido. Ayer, el alcalde José Luis Sanz dijo estar «satisfecho» por el trabajo y el esfuerzo que habían desempeñado los servicios municipales, que...
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