La consejera Portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha destacado este miércoles el compromiso del Ejecutivo regional con la investigación y la tecnología para la lucha contra el cáncer, a través de una serie de iniciativas y una «inversión histórica» en equipos sanitarios, una noticia que llega en un momento de creciente controversia sobre los problemas en el programa de detección precoz del cáncer de mama, especialmente en la zona de Talavera de la Reina y en otras localidades de la provincia, donde hasta 3.000 mujeres llevan más de cinco meses esperando una mamografía y también entre otras denuncias en otros puntos de la provincia, en este caso en los pueblos de los Montes de Toledo y La Mancha Alta toledana. Padilla ha hecho estas declaraciones en la rueda de prensa de los acuerdos del Consejo de Gobierno, en la que ha anunciado la autorización de una inversión cercana a los 22 millones de euros en los próximos cuatro años para el mantenimiento integral y evolutivo de los equipos electromédicos de alta tecnología en los centros sanitarios dependientes del SESCAM. «Estos equipos son fundamentales para el diagnóstico y tratamiento de miles de pacientes en toda la región», ha afirmado Padilla. Entre los equipos que se mantendrán con esta inversión se encuentran mamógrafos, mesas de biopsia mamaria, resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y equipos SPECT-TAC, cruciales para el diagnóstico del cáncer. En total, un 40% de la actividad hospitalaria en Castilla-La Mancha está dedicada al diagnóstico y tratamiento del cáncer, una cifra que se ha duplicado desde que el presidente Emiliano García-Page asumió la presidencia del Gobierno regional. Durante su intervención, Esther Padilla ha resaltado que, tras la legislatura de Cospedal, entre 2011-2015, Castilla-La Mancha ocupaba el primer puesto en obsolescencia tecnológica en sanidad, pero que hoy, gracias a una inversión superior a los 500 millones de euros, la comunidad se ha consolidado entre las tres primeras de España en renovación tecnológica . Un claro ejemplo de ello es la instalación de un PET-Resonancia en el Hospital Universitario de Toledo, una tecnología de última generación que solo está presente en tres hospitales en toda España y que se dedicará principalmente al diagnóstico del cáncer. Además, el Ejecutivo regional ha puesto en marcha el servicio de Medicina Nuclear en los hospitales de Cuenca y Guadalajara, lo que posiciona a Castilla-La Mancha como una de las pocas comunidades autónomas que ofrece este servicio en todas sus provincias, con la excepción de Albacete, donde se implantará en el marco de las obras de ampliación del hospital. Ante esta situación, Padilla ha insistido en que «todo este esfuerzo y toda esta inversión merecen la pena» para seguir garantizando la salud de la ciudadanía de Castilla-La Mancha, aunque no hizo mención directa a las críticas recientes al programa de detección precoz. La consejera ha dicho, por último, que gracias a la inversión y la renovación tecnológica, Castilla-La Mancha se sitúa como u n referente en la atención sanitaria , especialmente en el diagnóstico y tratamiento del cáncer.