Tras 6 décadas cierra H&H, icónico café en El Paso, Texas
Este era un negocio que por más de 6 décadas marcó una tradición en esta ciudad fronteriza, pero no pudo sobrevivir a la pandemia.
Maynard Haddad realizó su antigua rutina por última vez. Abrió el icónico H&H Coffee Shop y se sentó enseguida de la puerta desde las 7:30 de la mañana a leer el periódico, pero el pasado 22 de julio sería la última vez porque la cafetería cerró para siempre al final del día tras 63 años de estar operando en El Paso, Texas.
“Lo mantuvimos abierto todo el tiempo que pudimos por lealtad a nuestros empleados, pero es el momento de cerrar”, dijo Haddad.
Este era un negocio que por más de 6 décadas marcó una tradición en esta ciudad fronteriza, incluso la revista Texas Monthly lo consideró como “un lugar que se debía conocer”. La cafetería también ganó un premio James Beard por los clásicos estadounidenses en 2001.
Sin embargo, toda esta magia de los platillos con sabor a Texas y a la comida mexicana no pudieron sobrevivir a la pandemia y sus efectos nocivos a la salud y a la economía.
H&H Coffee Shop inició operaciones en 1958, sobre la calle Yandell Drive y fue fundado por el padre de Maynard. Siempre ha sido un negocio familiar y Maynard creció en este negocio junto con su hermano. Más tarde se expandieron al noreste de El Paso, pero lo cerraron en 1986 y Maynard regresó a la ubicación original. Ha estado allí desde entonces, junto con su hija Julianne, quien lo ha ayudado a administrar el restaurante. La idea de integrar un lavado de autos nació casi a la par de la cafetería dada a la gran afluencia de vehículos de la zona.
La cafetería es un espacio pequeño, mismo que contaba con una larga barra y cuatro mesas para cuatro personas a los alrededores. Mientras ordenabas del menú, tu vehículo era lavado minuciosamente.
Dentro del restaurante se escuchaba una mezcla de español e inglés ya que la mayoría de los trabajadores y muchos de los consumidores eran hispanos. La comida era preparada a la plancha mientras que el arroz y frijoles se servían directamente de grandes cazuelas.
A pesar de ser un negocio próspero por años, con la llegada del COVID-19 ya no se pudo continuar y el negocio empezó a decaer. Lo primero que dejó de operar fue el servicio de lavado de autos y las ventas de los alimentos comenzaron a disminuir, por lo que se tomó la decisión de cerrar de forma definitiva el restaurante.
Como todos los días Haddad llegó a su local, pero este jueves 22 de julio era diferente, había gente haciendo fila y esperando una mesa para comer.
Los clientes que esperaban en el exterior no dejaron pasar el momento para videograbar su llegada y posteriormente subirla a las redes sociales.
Haddad dijo que después de tantos años de trabajo este era un momento para descansar, de pasar tiempo con la familia y estar tranquilos.
“Ni siquiera sabía que hoy era mi aniversario” dijo Haddad en medio de risas. “Voy a pasar más tiempo con mi esposa porque el cierre del café también representa mi retiro”.