Jesús Murillo Karam: salud del exprocurador empeora; familia pide trasladarlo al hospital
Jesús Murillo Karam se encuentra preso en el Reclusorio Norte.
La noche de este jueves trascendió que la salud de Jesús Murillo Karam, exprocurador general de la República mexicana, ha ido empeorando debido a su condición de presión alta.
Al respecto, El Financiero pudo confirmar que la familia de Jesús Murillo Karam buscará trasladarlo a un hospital para su atención médica, derivado de varios días de sufrir hipertensión.
Al respecto, varios medios, e incluida la familia cercana de Murillo Karam, ha señalado que el exfuncionario ha presentado cuadros de presión alta recientemente, aunque no se han dado a conocer los motivos específicos de lo anterior, aunque su condición de hipertenso ya era señalada.
La salud de Murillo Karam, en observación
El exprocurador y también, exgobernador de Hidalgo, ha sido señalado por su mala salud en épocas recientes, sobretodo tras su detención, pues es aquejado por diversos padecimientos, que lo llevaron a ser intervenido quirúrgicamente en noviembre del año pasado, cuando se le practicó una edarterectomía carotidea de alto riesgo para permitir un mayor flujo sanguíneo. Por este procedimiento tuvo que estar dos meses hospitalizado.
Desde la detención del exprocurador durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, entre 2012 y 2018, la defensa de Jesús Murillo Karam se ha mantenido firme en cuanto a revertir la medida de prisión preventiva a la que se encuentra sujeto el exfuncionario por su presunta participación en los delitos de tortura, desaparición forzada y delitos contra impartición de justicia, todos ellos derivados del caso Ayotzinapa, donde 43 normalistas resultaron desaparecidos.
Desde entonces, la defensa de Murillo Karam ha argumentado que el exprocurador general padece Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), además de hipertensión arterial (padecimiento que ha manifestado en días recientes) e insuficiencia vascular cerebral, además de padecimientos no detallados en el corazón.
Sin embargo, el juez federal del caso, Marco Antonio Fuerte Tapia, ha negado ya el posible cambio de medida cautelar del exservidor, esto debido al riesgo de una posible fuga del acusado.