La Selección de Costa Rica se queda ‘sin palabras’, ‘sin ideas’ y ‘sin nada’ al perder con Japón
La Selección de Costa Rica se esforzó, pero en una Copa del Mundo eso no es suficiente. Nuevamente fue ampliamente superada y ya solo queda un juego ante Zambia.
La Selección Nacional Femenina sufrió una derrota de 2 a 0 frente a Japón en la Copa del Mundo, lo que marca el fin de su participación en el torneo. Aunque el equipo costarricense no fue goleado, enfrentó dificultades con un rival que dominó el balón y pudo marcar más goles. El resultado deja a Costa Rica en ruta a su regreso al país tras una participación reservada en el mundial.
Costa Rica planteó una estrategia defensiva, replegándose en su área y confiando en las individualidades para atacar, mientras que Japón optó por un juego rápido y explosivo por las bandas.
A pesar de mostrar orden y entrega en defensa, la selección costarricense no logró desarrollar una ofensiva efectiva. En este partido, la entrenadora Amelia Valverde optó por dejar en el banquillo a Gloriana Villalobos y Raquel Rodríguez.
Durante los 90 minutos del encuentro, las costarricenses no lograron realizar un solo disparo peligroso o acercarse a la portería rival. El equipo careció de respuesta para recuperar la posesión y mantener la calma al tener el balón.
En los dos encuentros de la Copa del Mundo, Costa Rica solo consiguió realizar siete disparos a puerta, de los cuales solo uno fue al marco contrario. Esto muestra la falta de contundencia ofensiva del equipo, con un promedio de un tiro al arco cada 25 minutos.
Aunque el marcador de 2 a 0 puede parecer engañoso desde el punto de vista defensivo, la arquera Daniela Solera tuvo un destacado desempeño y evitó un resultado aún más adverso al realizar tres paradas determinantes.
En cuanto a las actuaciones individuales, se extrañó la presencia de jugadoras determinantes como Katherine Alvarado, Melissa Herrera, Priscilla Chinchilla o Gloriana Villalobos. El equipo no logró conectar con las líderes ofensivas que se esperaba tomaran el rol de la ausente Shirley Cruz.
Desde el banquillo, llegaron jugadoras como Sheika Scott, una joven con determinación en el ataque, pero que no logró cambiar el rumbo del partido.
Al final del duelo, las jugadoras japonesas bajaron el ritmo y el último cuarto del juego careció de emoción, ya que no mostraron un deseo claro de conseguir más goles. Por su parte, la Selección Nacional, a pesar de su esfuerzo, no pudo descontar en el marcador.
Con esta derrota, Costa Rica suma su segunda en el mundial y las jugadoras quedaron sin respuestas. La delantera Raquel Rodríguez, en la entrevista posterior al partido, se quedó sin palabras al ser consultada sobre qué hizo falta para obtener un mejor resultado. Su mirada desafiante reflejaba la frustración, y describió problemas que detectó, como la falta de sinergia e intensidad en el equipo, y la necesidad de mejorar.
Aunque la entrega y el orgullo de la Selección Femenina son innegables, se puede criticar la falta de identidad y estilo de juego definido bajo la dirección de Amelia Valverde. El equipo llegó a un nuevo mundial apostando por una estrategia defensiva y dependiendo de errores del rival, situaciones que Japón y España no entregaron.
Ahora, la Selección Femenina buscará encontrar consuelo en el próximo partido contra Zambia, el próximo lunes a la 1 a. m., en el cierre de su aventura en Australia y Nueva Zelanda 2023. Esta Copa del Mundo ha puesto en atención hacia dónde va el fútbol femenino y los procesos de selección nacional.