Daniel Noboa se convierte en el presidente más joven de la historia en Ecuador
El candidato del Partido Acción Democrática Nacional, Daniel Noboa de 35 años venció a la correísta Luisa González en el balotaje de este domingo
Quito. En un sorprendente giro en la política ecuatoriana, Daniel Noboa, hasta entonces un completo desconocido en el ámbito político, cumplió el anhelo frustrado de su padre millonario al alcanzar la presidencia del país a la temprana edad de 35 años, convirtiéndose así en el presidente más joven en la historia de Ecuador.
Noboa, quien se mostró activo en redes sociales, con un semblante taciturno y un estilo sobrio en sus palabras, irrumpió de manera inesperada en el balotaje y ganó impulso con el paso de los días, finalmente venciendo a la izquierdista Luisa González con un 52% de los votos, frente al 48% de su oponente.
Desde su residencia en el balneario de Olón (suroeste), expresó su compromiso: “Mañana (lunes) empezamos a trabajar por este nuevo Ecuador... para reconstruir un país que ha sido gravemente golpeado por la violencia, la corrupción y el odio”.
Con esta victoria, Noboa no solo rompió con la serie de intentos fallidos de su padre, Álvaro Noboa, quien aspiró a la presidencia en cinco ocasiones sin éxito, sino que también asestó un duro golpe al exmandatario socialista Rafael Correa (2007-2017), quien fungía como padrino político de González y mantenía una larga enemistad con el padre de Noboa.
Educado en prestigiosas universidades extranjeras, Noboa se define como un político de centroizquierda, aunque cuenta con el respaldo de fuerzas políticas de derecha. Además de su carrera política, es sommelier, aficionado a la música, intentó adoptar una dieta vegetariana, colecciona ajíes y siente pasión por los autos y los caballos, según su equipo de prensa.
Peligros políticos
“Capaz me matan”, admitió Noboa en referencia a los peligros de la política, tras estar en los bastidores de las campañas electorales de su padre, quien en el 2006 compitió con el entonces poco conocido Correa.
En esa ocasión, el socialista obtuvo el 57% de los sufragios válidos y se mantuvo en el poder durante una década. A pesar de este linaje político, Noboa se distancia del histrionismo de su padre, que solía pedir el voto de los ecuatorianos de rodillas y con la Biblia en mano.
De apariencia atlética y juvenil, Noboa evitó el espectáculo en tarima y, usando chaleco antibalas, se enfocó en las nuevas generaciones. Incluso, días antes del balotaje, se convirtió en tendencia en las redes sociales con muñecos de cartón a escala real con su imagen.
Superando la impopularidad inicial que las encuestas le asignaban en los últimos lugares en la primera vuelta electoral, Noboa logró sobreponerse.
“Ha habido momentos de ansiedad, cuando ves que los números todavía no te acompañan (...) y momentos duros, cuando matan a un contendiente tuyo, y dices ‘bueno, yo estoy diciendo cosas similares a él, capaz me matan a mí también’”, confesó en una entrevista con esta agencia, recordando el asesinato del candidato Fernando Villavicencio, quien fue baleado días antes de la primera vuelta el 20 de agosto, luego de salir de un mitin en Quito.
Este magnicidio exacerbó el miedo en un país afectado por la violencia de numerosas bandas narcotraficantes, con una tasa de homicidios que se cuadruplicó entre el 2018 y 2022, llegando a 26 por cada 100.000 habitantes.
En guerra
La única incursión política previa de Noboa fue como asambleísta en el Congreso, cargo del que fue destituido cuando el presidente Guillermo Lasso disolvió el Congreso en mayo para convocar a elecciones anticipadas.
Durante su mandato de dos años, Noboa fue objeto de críticas debido a un supuesto conflicto de intereses, al financiar con su propio dinero el viaje de siete diputados a Rusia, uno de los principales destinos para el banano producido por la empresa familiar.
El viaje se realizó tras la invasión rusa de Ucrania, situación que generó controversia y críticas adicionales, incluyendo acusaciones de evasión de impuestos.
Noboa fue el primer candidato en inscribir su candidatura para los comicios de Ecuador en representación de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN).
El próximo presidente sostiene que Ecuador se encuentra en “una guerra”.
“Tenemos que ser firmes si queremos rescatar a este país de esta inseguridad”, argumenta. Su propuesta más destacada es la creación de barcos prisiones para aislar a los reclusos de sus redes criminales, además de la implementación de incentivos fiscales y préstamos asequibles para pequeños empresarios.
Noboa gobernará hasta completar el mandato originalmente destinado a Lasso, aunque no descarta la posibilidad de buscar la reelección en el 2025.
Al margen de su carrera política, Noboa ostenta una sólida formación académica, obtuvo un título en Administración de Negocios en la Universidad de Nueva York y una maestría en Administración Pública de Harvard Kennedy School.
Además, está casado con Lavinia Valbonesi, una influyente en temas de nutrición, con quien tiene un hijo y espera otro. Desde los 18 años, cuando fundó su primera empresa dedicada a la producción de eventos, hasta su papel como director de las áreas naviera y comercial en la Corporación Noboa, demostró su capacidad de liderazgo y versatilidad en diversos campos.
