Roberto Thompson sobre Alajuela: ‘Hemos olvidado que los centros urbanos son para la gente’
El alcalde de Alajuela, Roberto Thompson Chacón, asumió ese cargo por tercera ocasión en 2024, tras superar al entonces gobernante Humberto Soto. Sin embargo, tras año y tres meses en el cargo, el liberacionista habló con Revista Dominical sobre las principales problemáticas de la “Ciudad de los mangos”, tales como la subejecución del presupuesto, la falta de opciones de cultura y la atención de personas habitantes de calle.
Además, Thompson habló de la ciudad que la gustaría “heredar” a la población, la reinauguración del Teatro Municipal y la apertura de un nuevo hotel de 30 habitaciones en el centro de la ciudad. Le ofrecemos tanto la entrevista completa como en formato videopódcast. Para encontrar las ediciones más recientes de La entrevista del domingo visite nacion.com, el canal de Spotify o el canal de Youtube de La Nación.
— Tras un poco más de un año de haber regresado a la Municipalidad de Alajuela, ¿cuáles son los principales retos y dificultades que ha encontrado?
— Alajuela debería convertirse en uno de los motores de desarrollo de este país. Tenemos todas las condiciones para hacerlo. El aeropuerto internacional Juan Santamaría es un centro de logística, de atracción de empresas, de turismo, que deberíamos aprovechar mucho más.
“Tras 6 años de yo haber salido de la alcaldía nos encontramos un cantón que perdió competitividad. Una infraestructura bastante destruida, colapsada, diría yo. Muchos proyectos clave pendientes, por ejemplo, el puente del Coyol, que el país ha esperado 20 años. Eso afecta la generación de inversión, de empleo, las posibilidades, sobre todo para la gente joven.
“El gran reto que teníamos por delante era volver a posicionar el cantón como un motor de desarrollo, y para eso lo primero es generar confianza, invertir recursos. En el año 2023, el último año antes de que nosotros volviéramos, solo se ejecutó el 19% del presupuesto. Eso deja mucho que desear.
“Estamos en ese proceso. No ha sido fácil, hemos encontrado un Consejo Municipal complicado. Son 11 regidores de ocho partidos. Muy fraccionado. Eso ha generado roces a los que yo no estaba acostumbrado en los otros dos periodos. Pero bueno, vamos trabajando”.
— Cuando usted llegó, el año pasado, dijo que habían $150 millones sin usar. Muchos ayuntamientos más bien carecen de dinero, en el caso de ustedes, tenían dinero sin usar. ¿Han logrado atender eso? ¿En qué han usado los recursos?
— Cuando nosotros llegamos no había contrataciones, ni siquiera había contratación de asfalto, había muchos proyectos a medio camino; varios ofrecimientos de tinte político, más que todo, que no tenían contenido económico. Tuvimos que hacer un planteamiento en el presupuesto extraordinario. En este país ejecutar cualquier proyecto es complicado. Sin embargo, al final del año pasado llegamos casi a un 62% de ejecución.
“Para este año empezamos con el programa de recuperación de vías. Alajuela tiene un presupuesto de aproximadamente ¢85 mil millones, es casi cercano al de San José y muy lejano al de la mayoría de las municipalidades. San Ramón, por ejemplo, que es un cantón importante, debe tener un presupuesto de alrededor de ¢11 mil millones. Imagínese la diferencia. El gran reto es ejecutar esos recursos".
“En el año 2023, el último año antes de que nosotros volviéramos, solo se ejecutó el 19% del presupuesto. Eso deja mucho que desear”
Roberto Thompson, alcalde de Alajuela
— Cuando fue diputado, usted impulsó la Ley de Comercio al Aire Libre. El año pasado dijo que lo que estaba frenando ese tema era un reglamento que se tenía que aprobar en el Consejo Municipal. ¿Cómo ha avanzado eso? ¿Ya se puede aplicar?
— Sí, se aprobó un reglamento, pero nos ha costado implementarlo. ¿Por qué? Porque hay una serie de características de nuestros centros urbanos que no lo permiten del todo.
“Sin embargo, algunos negocios están solicitando las autorizaciones, hemos hecho un esfuerzo por generar esas condiciones. Yo creo que eso tiene que ir. Usted va a cualquier ciudad importante del mundo y el comercio al aire libre es fundamental.
“A pesar de no tener las condiciones, hay un propósito. Alajuela es un cantón muy grande, son casi 400 km², 14 distritos, todos con necesidades muy diferentes. En el centro urbano, queremos peatonalizar algunas vías, reordenar el tránsito, posicionar el transporte público, que cambie completamente la realidad de la ciudad. Si logramos eso, el comercio al aire libre va a ser una realidad".
Municipalidades desaprovechan el comercio al aire libre
— Este es su tercer periodo como alcalde, y en una ciudad como Alajuela, se espera una visión de futuro, que no sea solamente arreglar calles o poner basureros, sino un modelo de desarrollo. ¿Cuál es el modelo que usted tiene en mente? ¿Cómo debería ser Alajuela?
— Yo estoy empeñado en recuperar la historia, la identidad del alajuelense, pero además construir una ciudad para la gente. Tenemos un déficit en materia de desarrollo, sobre todo en los últimos años. Nos hemos concentrado en abrir carreteras, en mejorar el transporte de vehículos particulares, pero hemos olvidado que los centros urbanos son para la gente. Yo quisiera heredar una ciudad para la gente, en donde los espacios públicos los aprovechemos mucho más.
“Tenemos muy concentrado el tema de las zonas francas, pero la pérdida de competitividad y de un plan regulador ha permitido que ese desarrollo se vaya más hacia occidente, Grecia, San Ramón... Tenemos que volver a posicionar el cantón. Hay que plantear proyectos con visión país”.
— Las grandes ciudades tienen conceptualizado un espíritu, una identidad que las diferencia. ¿Cuál es la identidad de Alajuela más allá de ser un centro urbano de negocios?
— (Risas) Siempre dicen que cuando alguien de afuera llega a Alajuela, lo primero que hacen es ponerle un apodo. Alajuela es una ciudad muy alegre, muy calurosa, la gente es muy jovial. La gente es muy generosa con las personas que llegan. Hay todo un tema relacionado con eso, que tiene que ver con el centro, con el parque, con los mangos, con la cuentería.
“Tenemos un festival internacional de cuentos que va muy enfocado en esa línea, ese es el calor humano que se respira, ese característico sentido del humor que tiene el alajuelense que no lo ves en otras regiones del país. Hay que explotarlo mucho más, y eso nos puede permitir atraer a mucha gente, sobre todo en temas de turismo”.
¿Agenda de ocio y cultura en Alajuela?
— Otra problemática que nos señalaron los vecinos de Alajuela es el tema de la vida social, la oferta de cultura, de ocio, de vida nocturna, que además es muy importante para la seguridad. Mucha gente siente que después de las 8 hay poca oferta. ¿Cómo analiza eso?
— La gente está ávida de tener ese tipo de actividades. De hecho, cada vez que organizamos algo, se llena. Sin embargo, tiene que ver con lo mismo, con garantizar la seguridad, con garantizar la tranquilidad de las familias.
“Alajuela es una ciudad muy alegre. Los sábados y los domingos se ha desarrollado un baile en el parque central. Empezó con una pequeña marimba, los adultos mayores llegaban a bailar, ya es un poquito más formal, casi una pequeña orquesta. Es una actividad muy alegre. Eso hace que el parque brille y la gente vaya y disfrute.
En el parque central de Alajuela se arma el baile todos los sábados
“¿Por qué la gente va a los centros comerciales? Porque ahí se siente segura. Eso es lo que tenemos que volver a hacer. Recuperando esos espacios, mejorando la iluminación y caminando en la ruta de la peatonalización de los centros urbanos, podemos lograr mucho. Tenemos un reto, las ciudades en el centro se convierten en un lugar absolutamente vacío. Un domingo a las 8 p. m. ya no hay nadie. A través de estas acciones podemos cambiar el concepto.
“De hecho, en estos días recibimos una inversión importante: se está construyendo el primer hotel Sheraton en el centro de la ciudad, de 30 habitaciones. Eso implica que va a haber un enorme flujo de turismo hacia el centro de la ciudad, antes estaban cerca del aeropuerto, ahora vamos a tenerlo en el centro. Eso provocará que cambie la dinámica porque tendremos mucha gente caminando por la ciudad”.
— Usted señala que la gente está ávida de recursos de ocio, no solo en fin de semana, sino además entre semana. ¿Cómo se imagina la oferta cultural de Alajuela? ¿Qué pueden ofrecer?
— En Alajuela hay muchísimos grupos, muy buenos, mucho arte. En la administración anterior hicimos un esfuerzo por recuperar con sentido histórico algunos parques. En donde estaba el edificio municipal hicimos la plaza Tomás Guardia, donde estaba la casa de don Tomás.
“Tenemos un reto importante, que es el Teatro Municipal, que nos lo encontramos bastante deteriorado. Acabamos de enviar un presupuesto al Consejo Municipal por ¢400 millones para reactivarlo. Cuando ese teatro funciona, usted no se imagina las filas de gente.
“Esa recuperación del Teatro Municipal hará que el centro de la ciudad brille más. Para eso, necesitamos que nuestro Concejo Municipal vaya en la misma línea, y a veces es difícil. Algunas personas no tienen esa visión, y hay que convencerlos”.
— Ahora que menciona el Teatro Municipal, nos dijeron que el teatro lleva más de 2 años cerrado y está muy deteriorado, pese a que no es la primera vez que se le hace una inversión fuerte. ¿Qué lo ha llevado a deteriorarse tanto? ¿Infrautilización? ¿Falta de personal?
— Es una combinación de todo. En la administración anterior, nosotros hicimos una inversión importante y lo pusimos a funcionar. Sin embargo, no todo mundo tiene la misma sensibilidad en temas culturales y yo creo que en los últimos años este se dejó.
“Es una estructura vieja, formaba parte del salón de actos del antiguo Instituto de Alajuela, que es una de las pocas estructuras que quedan de la Alajuela de antes. Entonces, es una estructura que demanda mucha inversión. Todos los años habría que invertir. Pero se dejó, se dejó y ahora nos encontramos en esta situación (...).
“Obviamente, cuando usted habla de 14 distritos, habla de 14 comunidades distintas, también hay que llevar el arte allá. Tenemos que hacer un esfuerzo también para que toda la gente de las distintas comunidades, Turrúcares, La Guácima, La Garita, Sabanilla, Carrizal, también sientan que se les lleva actividades culturales. Yo no le tengo miedo a eso, más bien al contrario, como tenemos presupuesto, yo creo que es importante invertir también en arte y en cultura”.
“El Teatro Municipal nos lo encontramos bastante deteriorado. Acabamos de enviar un presupuesto al Consejo Municipal por ¢400 millones para reactivarlo"
Roberto Thompson, alcalde de Alajuela
— En caso de que el Concejo Municipal apruebe la inversión, ¿hay alguna fecha tentativa de apertura?
— Yo esperaría que para fin de año esté listo. Este es uno de los grandes temas que tenemos. Definitivamente el desarrollo integral de las personas pasa por la cultura, por el arte. La ciudad tiene mucha historia, cada rincón tiene historia, y eso hay que irlo recuperando, sobre todo para las nuevas generaciones.
“Yo crecí a 50 metros del Parque Central, ahí vivía mi abuelo, entonces todo lo relativo al centro de la ciudad me genera mucho entusiasmo. Yo lo que quiero es que mis hijos y mis nietos tengan la oportunidad de vivir eso”.