Químico usado en ataque a joven madre provoca mucha deformidad, dice experto
Jocelyn Ivannia Vallejos, de 31 años, ingresó al Hospital San Juan de Dios el 14 de abril con quemaduras de tercer grado en el rostro y el pecho, así como en ambos brazos y piernas.
Según confirmó el Organismo de Investigación Judicial, las lesiones fueron provocadas con ácido sulfúrico, el líquido que le lanzó su expareja sentimental, quien permanece en fuga.
Joselyn permaneció dos meses internada, hasta el 17 de junio, pero el proceso de sanación apenas empieza y requerirá cirugía reconstructiva. La Nación consultó a dos expertos sobre la consecuencias que implica para la salud de una persona ser expuesta a esa clase de compuesto.
Hombre atacó con ácido a expareja pese a orden de alejamiento y luego huyó
El doctor Gilberto Reyna Waldron, jefe del Servicio de Cirugía Plástica y de la Unidad Nacional de Quemados del Hospital San Juan de Dios, explica que este tipo de quemaduras se clasifican como químicas, ya sea por ácido o quemadura de base de óxido de potasio o potasa, que es la más frecuente.
“Son quemaduras que normalmente son muy profundas y pueden dejar mucha deformidad o cicatrización, se tiene que hacer un manejo agresivo estando internada (la persona) y un seguimiento intentando que las cicatrices no dejen limitaciones funcionales a la paciente”, explicó el galeno.
Reyna agregó que posterior al egreso del paciente, se tienen que hacer algunos tratamientos como infiltraciones o colocación de vendas de compresión, con el fin de estabilizar las cicatrices y que haya una mejor funcionalidad.
Javier Alpízar Cordero, director del departamento de química de la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED), explica que este ácido, cuya fórmula es H2SO4, está compuesto de dos átomos de hidrógeno, uno de azufre y cuatro átomos de oxígeno, que lo convierte en un químico muy corrosivo que provoca graves quemaduras en al piel.
“La principal fuente de ácido sulfúrico a nivel comercial puede ser en las baterías de automóvil, ya que es uno de los principales componentes, la concentración de ácido en las baterías está alrededor del 30% a 50%, entre más tiempo está en contacto con la piel, más graves son los efectos que puede sufrir la persona hasta llegar a casos más extremos, como la muerte del tejido cutáneo”, explicó.
Tanto el médico como el químico coincidieron, por separado, en que la recuperación por este tipo de lesiones suele ser lenta debido a los profundos daños que el ácido provoca en la piel.
En enero de este año, la Asamblea Legislativa aprobó un proyecto de ley para endurecer las sanciones por agresiones contra las mujeres cuando se den ataques con ácido, sustancias tóxicas, corrosivas o inflamables.
Cono la modificación del inciso e del artículo 8 de la Ley de penalización de la violencia contra las mujeres, ahora se considerara el empleo de esas sustancias como una circunstancia agravante de los delitos que ya penaliza esa iniciativa.