Gran Canaria no sentencia un partido que tenía ganado y agrava su crisis
El 'Granca' no se dejó intimidar por el 0-5 de inicio de Efes Estambul, tras canastas de Anderson (3) y Duston, y apoyado en los triples de Evans y Tillie no solo igualó el electrónico y animó a sus escasos aficionados, sino que además logró una renta de 7 puntos tras espectacular mate de DJ Strawberry.
Pese a ello, los pupilos de Ergin Ataman también hicieron un buen uso de la línea de 6,75 para reducir diferencias y cerrar este primer cuarto con un solo punto de desventaja (25-24).
Nada más comenzar el segundo parcial el propio pívot letón de Herbalife salió con renovados bríos y gracias a sus puntos el cuadro local hizo un parcial de 7-0 (32-26), si bien los triples de Micic y Motum restablecieron prácticamente la igualdad (35-34) en el ecuador de este periodo.
Los de Maldonado, lejos de venirse abajo, volvieron a irse en el electrónico merced a varias canastas de Evans, quien provocó además con una de ellas las reiteradas protestas del técnico visitante, que recibió una técnica.
El choque entró en una fase en la que el serbio Micic rompió una y otra vez a la defensa local, lo que motivó el enfado de Strawberry con su compañero Balvin, y el choque llegaba al descanso con un estrecho 52-50.
Los primeros compases tras el paso por vestuarios fueron nefastos para el equipo insular, ya que Beaubois puso en ventaja a los suyos y, además, Pasecniks sumaba su tercera personal, aunque poco después Micic hacía lo propio y se iba al banquillo.
El partido entró en una fase en el que el Herbalife, de la mano de DJ Strawberry, se mostró mucho más fluido que su rival en ataque, y Ataman paró el mismo tras un triple del escolta local (65-57), aunque justo a continuación tres puntos de Simon rebajaron los ánimos en el graderío.
Efes Estambul, con Duston haciendo mucho daño bajo el aro, se resistió a entregar el partido y llegó al último cuarto con un apretado 73-70.
Rabaseda reclamó a los aficionados que redoblasen su apoyo, y aunque Pleiss no estaba por la labor (73-72), el pabellón era una fiesta tras siete puntos consecutivos del veterano Oliver (80-72).
Simon sacó petróleo con un 2+1 y la cuarta falta de Pasecniks, con ocho minutos para el final, y además al Gran Canaria le costaba mucho encestar -en especial a Eriksson-, aunque pese a ello seguía comandando el marcador en el meridiano de este periodo (84-77).
El partido entró en los últimos tres minutos con un emocionante 88-83 y varios lanzamientos del Herbalife que se salían de dentro, algo que aprovechó Efes para ponerse a 1 a falta de 1.39 (88-87).
En los instantes decisivos, los otomanos fueron más certeros y se llevaron de manera inesperada los tres puntos.