No es ningún secreto que a Luis Enrique le encanta trabajar con los jóvenes. Incluso el otro día recordó que dentro de un vestuario nunca había conseguido una comunión tan grande con los jugadores como lo hizo en el Barça B, donde se acostumbró a convivir con chavales que absorbían como esponjas sus enseñanzas. Está convencido de que esa juventud es un activo de valor incalculable que, además, le aporta un potencial de crecimiento altísimo a la selección.
A la Eurocopa se ha llevado a nueve jugadores por debajo de los 25 años... Читать дальше...