«Chiquimarco», un fichaje con final estrambótico
Marco Antonio Rodríguez (Tepic, 10-12-1973) fue testigo de la histórica goleada que Brasil recibió en las semifinales ante Alemania (1-7) y del Uruguay-Italia, el partido en el que Luis Suárez mordió sin rubor el hombro de Chiellini ante los ojos de todo el planeta. El mexicano que arbitró dos de los encuentros más recordados del Mundial 2014 dio un vuelco a su vida al despedirse de aquel campeonato y hoy esperaba debutar como entrenador en el partido entre el Salamanca CF UDS y el Arenas, correspondiente a la primera jornada de Liga en Segunda B. Sin embargo, el mediático exárbitro, que participó en tres Mundiales, no se sentará en el banquillo de El Helmántico porque el club, propiedad de su compatriota Manuel Lovato, informó ayer de su marcha a través de un comunicado. Una salida controvertida.
Una fuerte personalidad
El Salamanca CF, club fundado en 2013, anunció el pasado martes a «Chiquimarco», que un día después se presentó ante los medios y dirigió su primer entrenamiento. Personaje de fuertes convicciones religiosas y marcada personalidad, dejó claro desde el primer instante que él sería el que tomaría las decisiones y que no se dejaría manejar. Propuso que en esta aventura le acompañara su hermano y gente de su confianza, peticiones que generaron tensiones con una directiva que ofreció otras opciones. «Querían a una persona para que pusiera su título y entrenase otro. He invertido mucho en mi preparación para que no se me respete. Empecé a tomar decisiones y me bloqueaban, no puedo ser una persona que solo se preste a poner su título para entrenar», relató el exárbitro en la Cope.
Aunque desde el club no hubo ayer declaraciones, a los dirigentes no les habría gustado la intención del exárbitro de compaginar el cargo con su colaboración en el canal televisivo de deportes GOL. Además, parte del vestuario tampoco compartía los métodos de un entrenador que había generado recelo por su inexperiencia y el exárbitro tuvo que vaciar su taquilla. Argumentos que chocan con los del técnico. «He tomado una buena decisión al decidir no sentarme en un banquillo y permitir que otros tomaran las decisiones que me competían», insistió «Chiquimarco».
La primera aventura como entrenador de «Chiquimarco» comenzó ya torcida desde el primer día porque llegó de rebote al banquillo. Fue el elegido por Lovato, el empresario que preside el Salamanca CF, como sustituto de José Luis Trejo, técnico mexicano fichado a principio de verano al que la Federación Española no autorizó a ejercer en Segunda B al carecer del título UEFA PRO. Sin comenzar aún la Liga, el dueño del club ha iniciado ya el casting en busca de su tercer entrenador en la temporada 2019-20. «El UDS Salamanca ya está trabajando para encontrar la mejor alternativa para el banquillo», explicó el club en el comunicado en el que anunció la destitución de Rodríguez, al que agradeció «el compromiso y el trabajo del entrenador durante estos días».
Mensaje en las redes
Poco después de anunciarse su cese, el exárbitro dejó ya pistas sobre el motivo de su despido y avivó la posibilidad de una renuncia voluntaria al cargo antes las imposiciones de la directiva. «¿Cesado? El título de entrenador Grado Superior o UEFA PRO debe ejercerse con profesionalismo y ética. Un genuino entrenador no vende al mejor postor su inversión de años de preparación, jamás permitas ser prestanombre y que otros sin la cualificación europea te utilicen», escribió en Twitter. «No podía participar en una línea de trabajo pensando que solamente estaba en el Salamanca CF UDS por tener la licencia», añadió a lo largo del día.
La presencia mexicana en el Salamanca CF, un conjunto que parte con el objetivo del ascenso, no se limita a su dueño porque en la plantilla también hay jugadores de ese país como «Chatón» Enríquez, Jehu Chiapas, Néstor Calderón, Martín Galván, Kristian Álvarez y Ulises Torres. Además, Ulises Zurita ejerce como presidente institucional.