Aunque en 1984 ya era una estrella del golf con tres grandes en su palmarés, el momento más importante en la carrera de Severiano Ballesteros lo marcó su triunfo en la cuna del golf. En ese momento logró su segunda Jarra de Clarete y dejó su sello impreso en el momento oportuno y en el lugar más importante. «No cabe duda de que hubo un magnetismo especial en esa última jornada y estaba convencido de iba a embocar ese 'putt' ganador» recuerda David Cannon , el fotógrafo que captó la instantánea más famosa del cántabro. «Seve siempre fue mi ídolo deportivo, comenzamos nuestras trayectorias en el mundo del golf con un año de diferencia y mantuve una relación muy cercana con él y su familia. En el momento en el que comencé a disparar la cámara en el hoyo 18 ya sabía que, si no surgía ningún problema, iba a conseguir la foto de mi vida». La logró, por supuesto, al igual que el de Pedreña hizo historia para el golf español. Noticia Relacionada GolF estandar No El Open Británico cumple 150 ediciones Miguel Ángel Barbero El torneo más antiguo del mundo está de cumpleaños y no es casual que lo celebre en St. Andrews, el lugar donde comenzó este deporte en 1744. La ciudad está engalanada para la ocasión y nadie se lo quiere perder A su estela intentarán agarrarse los cuatro españoles que desde hoy estarán presentes en este 'links' escocés. El que parte con más opciones es Jon Rahm , número tres del mundo, al que motiva especialmente tratar de batir las marcas de su admirado referente deportivo. «Siempre he dicho que como europeo el torneo que más me apetece ganar es el 'British'; y si es en St. Andrews hay un extra aún mayor de motivación», anuncia el vasco. 64 golfistas españoles son los que han participado en las 150 ediciones del Open Británico. El primero fue Ángel de la Torre, en 1920. Por lo que respecta a la veteranía, Sergio García es el que más veces ha pateado el recorrido, pues esta será la quinta vez que dispute un grande entre sus cuerdas. «Para mí es un campeonato muy divertido y siempre trato de disfrutarlo al máximo», señala el castellonense, que este año llega un poco tapado en las apuestas a causa de sus desavenencias con el PGA Tour y su apuesta por el LIV Golf. En el lado opuesto, Adri Arnaus jugará por primera vez el Old Course con una preparación específica de Open. «Lo recordaba muy diferente de cuando lo jugué como amateur y de las veces en las que hemos venido a disputar la Dunhill con el Circuito Europeo», comenta. Para el catalán, la principal variación consiste en que las calles se encuentran «muy rápidas y los 'greens' muy duros, lo que unido al viento fuerte que tendremos hará que sea difícil hacer pocos golpes. Pero yo me encuentro bien después de jugar un buen torneo la semana pasada y espero hacer un buen papel». El cuarto hombre en liza, Pablo Larrazábal, es el que presenta un mejor palmarés en la temporada. Es el único que ha ganado dos veces (Suráfrica y Cataluña) y ya jugó aquí en 2015, cuando venció Zach Johnson . Este tipo de campo clásico, corto y con truco, es el que mejor se adapta a sus cualidades.