El pleno al quince del Madrid fue un concurso de golazos con tres participantes estelares: Valverde, Rodrygo y Vinicius , este último, ángel y demonio del partido ante el Mallorca. Volvió a encandilar al Santiago Bernabéu con una brillante actuación y un gol decisivo, y exasperó a los rivales con su infinito catálogo de regates y filigranas, y una buena dosis de carácter y personalidad. El brasileño las tuvo de todos los colores con los jugadores de Mallorca, en especial con Raíllo y Maffeo . Ambos acabaron el partido con amarilla, algo de lo que el brasileño se libró por milímetros. No por una mala patada o una acción violenta, sino por sus constantes broncas con los rivales que le reprocharon, primero, Kroos pidiéndole que se dedicara a jugar al fútbol y, segundo, Ancelotti tras enfrentarse con Aguirre: «Vinicius es un jugador especial por cómo juega. Intenta siempre regatear y entiendo que el rival se pueda enfadar más de lo normal, pero esto son cosas que pasan en el fútbol. Él, poco a poco, irá aprendiendo con la suma de experiencias», dijo el italiano. Noticia Relacionada Fútbol estandar No Golpes de genio en el Bernabéu Hughes El Real Madrid golea a un correoso Mallorca con goles extraordinarios de Valverde, Vinicius y Rodrygo Vinicius ha iniciado la temporada dando recorrido a su estelar campaña del pasado curso. Lidera al equipo con asistencias, goles y actuaciones sobresalientes, pero también acumula episodios polémicos con algunos contrincantes por lo que ellos consideran una forma de jugar irrespetuosa: «Hay que hablar en el campo y les felicito porque fueron mejores. No soy de quejarme ni de árbitros ni de rivales ni de nada. ¿Si a mis jugadores les ha molestado cómo ha jugado Vinicius ? Pregúntele a ellos. Para mí lo que pasa en el campo ahí se queda», explicó el entrenador mexicano del Mallorca en la nueva sala de prensa del Bernabéu. Insistido Ancelotti por el comportamiento del brasileño y su relación con los colegiados, Carletto dejó una respuesta tajante, pero también algo ambigua: «Vini no tiene que cambiar nada de su actitud. Creo que respeta mucho a los árbitros y a los rivales, y si no lo hace, tendrá que hacerlo». También hubo ruido alrededor de Asensio. Con 1-1, Ancelotti tenía previsto meterle, junto a Mariano. Con el 2-1, cambió de idea y, además, tras el gol de Vini se lesionó Lucas Vázquez, lo que le obligó a hacer un cambio rápido por Carvajal , consumiendo así la tercera ventana de sustituciones. Eso provocó el enfado de Marco, que se encontraba calentando en la banda y, evidentemente, dejó de hacerlo, pero no con las mejores manera. Marco se sentó en el banquillo tirando el peto de malos modos y dando una patadita a una botella: «Se ha enfadado y estoy de acuerdo con él. Quiere jugar, y eso es lo que vale. Lo tengo en cuenta, para nosotros es un jugador muy importante», dijo Ancelotti, con su habitual manguera apagafuegos.