Rebelión en paseo de La Habana: el futuro túnel del Bernabéu que asedia al último reducto de barrio
En el tramo del paseo de la Habana, entre las plazas de Quito y los Sagrados Corazones, hay comercios antiguos, firmas de renombre, vecinos que van más allá del saludo protocolario y vida, mucha vida. También hay dos carriles de circulación por sentido, un aparcamiento en línea de zona azul en la acera de los impares y otro en batería diagonal en el lado opuesto de la calle, cuyas líneas verdes amanecieron pintadas meses atrás. Aquel rediseño motivó que la vía perdiese un carril en cada dirección (de tres a dos) y se adecuase el ancho de los mismos a la actual normativa: 3,5 metros. Los atascos, en palabras de los residentes, comenzaron a brotar. Ahora, sometido a información pública el proyecto definitivo de dos aparcamientos bajo tierra en el entorno del Santiago Bernabéu, un nuevo frente amenaza al enclave. Un enclave acomodado –todo hay que decirlo– que mantiene la esencia de barrio. Y ello pese a estar rodeado: Azca a un lado, al otro El Viso, y allá a su frente el Madrid. El problema, resumen los afectados, es la entrada al túnel de acceso al futuro parking de Padre Damián, proyectada a la altura de los números 52 y 54 del paseo de la Habana. Sufragado al completo por el Real Madrid, el proyecto cuenta con el visto bueno del ayuntamiento; para ello, el club blanco tendrá que desembolsar cerca de 106 millones de euros a cambio de la concesión por los próximos 40 años. Código Desktop Imagen para móvil, amp y app Código móvil Código AMP 1920 Código APP En definitiva, una imponente obra que los moradores de la zona conocieron el 26 de septiembre. «Nos enteramos por la prensa», recuerda la presidenta de paseo de La Habana, 50, Sacramento Ramos, quien, junto a su hermana Inmaculada, ha movilizado en tiempo récord al vecindario para intentar modificar la boca de la discordia . El 6 de octubre convocaron una reunión a la que asistieron una quincena de representantes de las 20 comunidades damnificadas, además de varios comerciantes. De ahí nació la 'Iniciativa vecinal en defensa del medio ambiente y contra el túnel en paseo de La Habana-Padre Damián'. A la hora del aperitivo, Sacramento e Inmaculada hacen de improvisadas cicerones con el fin de tomar la temperatura al barrio. Ataviado con su mandil, Javier Aceituno es el primero en hablar. Trabaja desde pequeño en la frutería Maruja, abierta desde 1958. «Si ponen eso en medio, se perderá la visibilidad del negocio y los clientes no podrán parar un momento con el coche para entrar a comprar», resume, convencido de que la semipeatonalización anunciada, que dejará la calle con un solo carril por sentido, no traerá prosperidad al espacio. A pocos pasos de allí, María Velasco sale con su bata para expresar su rechazo. «El problema es el mismo, pero si a eso le sumas que al vender medicamentos urgentes hay gente que tiene que parar en doble fila...», advierte la titular de la farmacia, ubicada en el 50 de la calle. Vista general del paseo de la Habana desde la plaza de los Sagrados Corazones ISABEL PERMUY Eleuterio Gallo y Ana María López, propietarios de la joyería Terín, también son conscientes de los posibles obstáculos que traería la remodelación. «Si ya en los días de partido no hacemos nada de negocio, con esta obra estaríamos igual pero casi de forma permanente», explican, con el 80 por ciento de su clientela llegada de fuera. «Si no tienen donde aparcar no van a venir». Y en la misma línea, Kiska Torralbo y su prima María Luisa Muñoz, al frente de la zapatería Don Pedro, inciden en que la gente que compra en las tiendas «de toda la vida» acuden a ellas de forma deliberada: «Vienen muchas personas de la carretera de Burgos porque antiguamente esta pasaba por aquí». «Proyecto trampa» A las quejas de los comerciantes se unen también las de los vecinos. «La calle está bien así, solamente de pensar en lo que van a hacer me caigo al suelo del susto», expresa con efusividad Isabel Iglesias, afincada en el portal 48. A sus 86 años, María Ángeles Olarte coincide con ella en la nula necesidad de levantar el paseo de La Habana para que los autocares del Real Madrid y otros vehículos de grandes dimensiones accedan desde allí al estadio. «Un campo de fútbol así tiene que estar fuera de la ciudad», remarca, antes de despedirse. Desde su ventana, Estanislao observa a un lado las obras del coliseo y al otro el actual tramo del paseo de La Habana. Para él este es un «proyecto trampa», dibujado a beneficio del Real Madrid. Y lo que es peor, la entrada al túnel afectará al triángulo formado por la Castellana, Concha Espina y el propio paseo de La Habana, un área «con verdadera vida de barrio». «Al situar ahí el acceso se creará una barrera entre las dos aceras, creando una división, y convertirá la calle en una 'ronda' », expone por teléfono, sin entender el porqué de una ubicación que podría trasladarse a la parte de Padre Damián colindante al estadio y huérfana de residentes. Noticia Relacionada estandar No Un túnel unirá el Paseo de la Habana y Padre Damián y habrá dos nuevos parkings en el entorno del Bernabéu EP Se ensancharán algunas aceras, con más zonas estanciales y ajardinadas y se crearán áreas de seguridad en entornos escolares Precisamente, Inmaculada y Sacramento Ramos pidieron ayer por la tarde el turno de palabra en el pleno de la junta de Chamartín. «Los vecinos, empresas y comerciantes del paseo de La Habana no podríamos ser recogidos por un taxi ni por una ambulancia que tuviera que parar unos pocos minutos para recoger a un enfermo. Los comercios tampoco podrían recibir las mercancías que les son servidas por sus proveedores en camiones o furgonetas porque de parar estos unos minutos provocarían un atasco en el carril de circulación», sostuvieron. El viernes, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante , se reunirá con ellas para recoger las quejas y estudiar posibles soluciones. Desde el mismo área municipal subrayan a ABC que «el túnel va a mejorar la zona, ya que va a dedicarse más espacio al peatón y va a reducir el tráfico rodado en esta vía». No obstante, el periodo de alegaciones continúa abierto hasta el 26 de octubre. «Se estudiarán todas las reclamaciones para dar con un modelo que se ajuste a las necesidades de todas las partes», añaden. Unas reivindicaciones que visto lo visto no tardarán en llegar.