Un estudio concluye que el calor extremo de abril era casi imposible sin cambio climático
El episodio de calor de abril fue raro, fue extremo y hubiera sido prácticamente imposible sin el cambio climático de por medio. Es la conclusión de un grupo internacional de científicos que, en apenas una semana, ha analizado las temperaturas de récord registradas en España y en la región mediterránea para responder a una pregunta: ¿tiene la huella del cambio climático? La respuesta es afirmativa. «Fue un episodio muy raro en el clima actual, pero un evento de este extremo habría sido casi imposible en el clima más frío del pasado», resume Friederike Otto, profesora de Ciencias del Clima en el Instituto Grantham del Imperial College de Londres. Los modelos climáticos apuntan a que, ante el aumento global de las temperaturas, las olas de calor, las lluvias torrenciales o los huracanes se multiplicarán. Pero achacar al cambio climático alguno de estos episodios extremos concretos cuando ocurren no es fácil ni automático. Los expertos deben analizarlos para determinar en qué medida el calentamiento global los impulsó o los exacerbó, y así diferenciarlos de lo que lo que sería, simplemente, un efecto poco probable pero posible del clima. Ahora, los científicos del grupo de trabajo del World Weather Attribution han analizado el promedio de la temperatura máxima que hubo del 26 al 28 de abril en el sur de España y Portugal, la mayor parte de Marruecos y noroeste de Argelia. Todos estos países sufrieron temperaturas extremas: además del récord continental español para abril de 38,8 °C , Portugal también vio su máxima para el mes, con 36,9º. En Marruecos las temperaturas superaron los 41° en algunas ciudades y en Argelia los registros superaron los 40. Los autores concluyen que estos registros ni siquiera son normales bajo el actual escenario de calentamiento global. Calcularon que el periodo de retorno, es decir, la probabilidad de que se dé una anomalía así en abril es de una vez cada 400 años en el clima actual o, lo que es lo mismo, había un 0,25% de probabilidades de que este evento climático se pudiera producir este año. Pero si se saca de la ecuación el actual nivel de calentamiento global, la probabilidad es mucho menor. En concreto, con estimaciones «conservadoras», el grupo calcula que el cambio climático multiplicó por 100 las probabilidade s del episodio. ¿Eso implica que, sin cambio climático, la probabilidad hubiera sido de que se diera una vez cada 40.000 años? «No quiero precisar los 40.000 años, pero un cálculo rápido arrojaría datos que apuntan en esa dirección», explica otra de las autoras del estudio, Sjoukje Philip, del Real Instituto Meteorológico de los Países Bajos. «Es importante resaltar que 'las cien veces' es una especie de límite inferior« , ha explicado Otto. «Sabemos que, definitivamente, la probabilidad ha aumentado más de cien veces, por lo que creo que (una vez cada) 40.000 años también sería solo la estimación más baja de cómo de improbable es este evento», continúa. Prácticamente, «el equivalente estadístico de imposible». MÁS INFORMACIÓN noticia No El clima europeo muestra ya cambios «alarmantes»: de los cien días de fuerte estrés térmico en el sur a la sequía más extensa noticia No El episodio de calor se salda con más de un centenar de récords en media España noticia No La Corte Internacional clarificará la responsabilidad legal de los países en el cambio climático Además, apuntan los autores, las temperaturas fueron hasta 3,5 grados más altas de lo que habrían sido sin el cambio climático.