Los guardianes de la esencia del buen aceite de oliva se citan en El Carpio de Tajo

Corría el año 2005 cuando un selecto club comenzó a dar sus primeros pasos. Fue entonces cuando el aristócrata, ingeniero agrónomo y empresario Carlos Falcó creó la asociación Grandes Pagos del Olivar (GPO) , de la que forman parte siete productores de aceite de oliva virgen extra de varias partes de España. Todos ellos se reunirán este lunes 20 de mayo en la almazara toledana Casas de Hualdo, en El Carpio de Tajo , para velar por el presente y el futuro de este suculento producto, cual guardianes del conocido como oro líquido. Para formar parte de este grupo, la condición sine qua non es ser un pago, como bien define el nombre de la asociación, es decir, un terruño delimitado y muy controlado que aporta singularidad al aceite de oliva virgen extra. Pero ese no es el único requisito, ya que los miembros de GPO deben respetar y practicar una filosofía común en la producción basada en la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, junto con la innovación, el uso de la tecnología más avanzada y el intercambio de conocimiento. Noticia Relacionada estandar Si Los precios del aceite tardarán meses en bajar pese a crecer un 28% la producción Nerea San Esteban Comprar aceite de oliva en abril fue un 68,1% más caro que el mismo mes del año pasado. En lo que llevamos de 2024, su precio ha aumentado un 14,8% Algo que, por el momento, sólo han conseguido los siete integrantes que ahora mismo lo componen. Productores olivareros de varias partes de España, cada una con sus peculiaridades y sus variedades de aceituna que elaboran aceites de oliva virgen extra únicos en el mundo. El último en sumarse a ese selecto club ha sido Masía El Altet (Alicante), pero de él ya formaban parte Hacienda Queiles (Navarra), Aubocassa (Mallorca), Castillo de Canena (Jaén), Marqués de Valdueza (Badajoz) y los dos pagos toledanos Marqués de Griñón (Toledo) , nombre del fundador de GPO, Carlos Falcó, y Casas de Hualdo (Toledo), donde este lunes se reúnen todos ellos. El objetivo de este encuentro, explica a ABC el director general del Grupo Castillo de Canena y presidente desde 2021 de GPO, Francisco Vañó , es la «transferencia de conocimientos» de cada uno de esos productores. La reunión presencial de todos ellos se enmarca dentro del programa de actividades de la asociación, que prevé una visita semestral a una de las siete almazaras y olivares que componen el grupo, donde se tratan, según informa, los problemas que les acucian, las consecuciones, una situación del mercado, un intercambio de experiencias e innovaciones agronómicas e industriales. Francisco Vañó, director general del Grupo Castillo de Canena y presidente desde 2021 de GPO «Somos una asociación donde prevalece precisamente el corporativismo, la ayuda mutua, el apoyo mutuo, la transparencia, ... en un sector que era antes bastante individualista y donde la información pues generalmente fluye poco. Somos un ejemplo palmario de cómo la colaboración, el intercambio de ideas y de conocimiento pues lo que hace es fortalecernos a todos», afirma Vañó, que no cierra la puerta a nuevas incorporaciones al grupo de siete pagos y, por eso, anima a otros productores a sumarse. «Nuestra idea es ir creciendo poco a poco, incorporando realmente a socios que aporten valor, que aporten conocimiento, que tengan realmente una trayectoria intachable, y sobre todo que cumplan con una serie de requisitos», manifiesta. Entre esas exigencias, cita: «que sean cosecheros, que tengan sus propios olivares y almazaras, y que tengan cubiertos todos los eslabones de la cadena de valor, tanto la parte agronómica como industrial. Es decir, la transformación del aceite en su bodega, con su propia envasadora, y que tengan una red comercial, de tal forma que estén presentes en distintos países, que exporten y tengan una trayectoria ya de cierto calado». Aceites de oliva virgen extra de los siete productores que componen la asociación Grandes Pagos de Olivar (GPO) Situación del sector olivarero Todo ello, además, en un momento de cierta inestabilidad para el sector olivarero que al grupo de Grandes Pagos del Olivar de España , tal y como apunta su presidente, no les afecta directamente. «Nosotros estamos en una situación de cierto confort». Aun así, reconoce que «la última cosecha fue muy corta, después de otras dos anteriores que tampoco fueron especialmente buenas, aunque nosotros no compramos aceite, sino que todo lo que comercializamos es de lo que obtenemos de nuestro pago, por lo que no estamos tan expuestos a la volatilidad de los mercados». De cara a la campaña actual, que es uno de los temas que se tratará el lunes, Francisco Vañó es más optimista. «Ha habido una buena floración, un buen cuajado del olivar y las temperaturas no han sido tan elevadas como el pasado año. Esta es una ventaja que tenemos porque, como GPO está presente en varias zonas olivareras, podemos hacer una radiografía de cómo está el olivar en España», dice con cierta cautela, puesto que cree «aún es pronto para hacer una valoración» y hasta dentro de un mes, aproximadamente, no se sabrá si el sector podrá pasar página a un annus horribilis .