Las clarisas cismáticas inician «acciones legales» contra el Ayuntamiento de Belorado y los medios de comunicación

Las clarisas de Belorado , que han abandonado la Iglesia Católica para sumarse a la Pía Unión de San Pablo Apóstol de un falso obispo excomulgado, han respondido a través de su «gabinete jurídico» a las últimas informaciones sobre sus actividades en el monasterio. Mediante un comunicado remitido por el despacho «Ex Aequo», localizado en Tarancón (Cuenca), muestran su descontento con «las acusaciones falsas vertidas sobre las hermanas en los últimos días». Advierten, además, de que «se están tomando las acciones legales pertinentes contra el Alcalde de Belorado, Álvaro Eguíluz , y su Ayuntamiento por dar información privada públicamente sobre un procedimiento administrativo concerniente a la Licencia de Actividad de criadero del Monasterio de Santa Clara». Se refiere, en este sentido, al criadero de perros que el propio alcalde reconoció que carecía de licencia para esa actividad. Sin embargo, según el comunicado enviado este jueves a los medios dicha información «está totalmente tergiversada, pues se siguen haciendo trámites al respecto de la referida licencia» ya que, detalla, el informe técnico del consistorio dice literalmente que «el uso solicitado no corresponde con un uso propio de la institución por lo que se informa desfavorablemente» En este sentido, las clarisas cismáticas se preguntan «por qué no es uso propio de la institución» y alegan que dicho informe carece de motivación jurídica al respecto. «¿Es el Ayuntamiento de Belorado quien marca los usos que puede tener o no esta institución religiosa?, o, por el contrario, ¿Las hermanas, por el hecho de su condición de religiosas no son igual que el resto de ciudadanos a la hora de ejercer una actividad económica?», reza el texto enviado por el gabinete jurídico. Consideran, en cambio, que la denegación de la licencia se hace « a fin de tener contentos a cuatro vecinos que se quejan porque supuestamente hacen ruido los perros con sus ladridos» . Más aún, creen que podrá tratarse de «una discriminación que vulneraría el Derecho Fundamental del Artículo 16 de la Constitución», de libertad religiosa y de culto. «¿Es un uso propio de la Institución hacer y vender dulces y no lo es dedicarse a la cría de canes?», vuelven a preguntarse. Noticia Relacionada estandar No El obispo excomulgado publica un vídeo en el que las clarisas agradecen haberse «sometido» a su jurisdicción José Ramón Navarro-Pareja El mismo día en que se anunció el cisma, el religioso celebró un 'Te Deum' en la capilla del monasterio en la que participaron las monjas y algunos familiares El citado despacho jurídico que dice ser de las clarisas de Belorado anuncia también que «se van a tomar acciones legales contra varios medios de comunicación en caso de no retractarse y mostrar la información de forma veraz». Así, advierte de que »ya que se está visualizando al detalle tanto la prensa escrita como los programas de televisión« por «dejar entrever que las hermanas podrían estar incurriendo en una actividad ilícita». «Desgraciadamente, estas acusaciones tan graves, desproporcionadas y sin consideración ; ya han tenido un perjuicio sobre las Hermanas Clarisas por parte de una Protectora de Animales de Burgos, contra la que también se van a tomar acciones legales», añade el escrito. A continuación explica que tienen constituida una entidad de Protección Animal, «basada en las enseñanzas de San Francisco de Asís, poseen ya su número de afijo para la cría de canes y además pertenecen a la Federación de Asociaciones para el Fomento y Conservación de las Razas Caninas Puras». El comunicado concluye por pedir respeto para las monjas , como personas y como institución religiosa que se dedica «a sus oraciones, el cuidado de animales, la realización de dulces y no están atacando a nadie. Llevan una vida diaria muy sencilla y de sacrificio». También se advierte de que «se tomarán medidas legales contra todo aquel o aquello que falte a la verdad sobre las mismas». «El surgimiento de la noticia sobre la venta del monasterio y las hermanas clarisas que lo habitan, no da derecho a nadie a realizar juicios paralelos, que están motivando el acoso y odio hacia esta institución religiosa y sus miembros», concluye el comunicado.