Jurgen Klopp , de retiro voluntario desde que el pasado 30 de junio abandonase el banquillo del Liverpool, ha sido confirmado como nuevo director global de fútbol en Red Bull , cargo que asumirá el 1 de enero de 2025 y desde el que supervisará la red internacional de clubes de la empresa de bebidas energéticas. El entrenador alemán, de 57 años, inicia de esta manera una nueva etapa en los despachos, alejado de los banquillos , pero aún vinculado con el fútbol de alto nivel. Según explica el comunicado con el que Red Bull anunciaba ayer el fichaje, Klopp desempeñará un «papel estratégico». Entre sus cometidos estará el de apoyar a los directores deportivos de los clubes en el avance de la filosofía Red Bull, aprovechar su red de contactos para ayudar en la búsqueda de los mejores talentos y contribuir a la formación y el desarrollo de los entrenadores. A día de hoy, Red Bull posee el cien por cien del accionariado en seis clubes repartidos en tres continentes: el RB Leipzig alemán, el Red Bull Salzburgo y el FC Liefering austriacos, el New York Red Bulls estadounidense, el Red Bull Bragantino brasileño y su más reciente adquisición, el Omiya Ardija japonés, club de la tercera categoría que se quedó en agosto de este año tras comprárselo a NTT, gigante nipón de las telecomunicaciones. Sobre todos ellos tendrá mando y poder Klopp , que deja atrás casi 25 años dirigiendo equipos para involucrarse en un proyecto novísimo para él. «No podría estar más ilusionado», dijo en el comunicado del anuncio. «Puede que el papel haya cambiado, pero mi pasión por el fútbol y por las personas que hacen del juego lo que es no lo ha hecho». Ganador de una Champions y subcampeón en dos ocasiones, al margen de otro buen número de títulos, Klopp ha demostrado que sabe de tácticas y planificación de partidos, pero está por comprobar cómo se desempeña en un puesto que exige una visión más global. «Veo mi papel, principalmente, como un mentor para los entrenadores y la dirección de los clubes pero, en última instancia, soy una parte de una organización única, innovadora y con visión de futuro». Klopp reportará directamente a Oliver Mintzlaff , director general de proyectos corporativos e inversiones de Red Bull, quien en la misma nota corporativa desveló lo que esperan de su último fichaje estrella: «Klopp es una de las figuras más grandes e influyentes del fútbol mundial, con unas habilidades y un carisma extraordinarios. Cambiará las reglas del juego para nuestra participación en el fútbol internacional y su continuo desarrollo. Esperamos impulsos valiosos y decisivos en áreas clave para hacer que los clubes sean aún mejores, tanto colectiva como individualmente». Mintzlaff es el principal valedor de Klopp. No en vano, él fue el encargado de asumir el mando del RB Leipzig, aún en tercera división, cuando Red Bull se quedó con las acciones del club. Desde su puesto de director general y CEO vivió en primera persona el ascenso a la Bundesliga, y también el debut en Champions y el primer título de la franquicia, la Copa de Alemania. Tras la muerte de Dietrich Mateschitz , fue ascendido en la compañía, por lo que de él dependen también los dos equipos de Fórmula 1 y el resto de inversiones deportivas de Red Bull. El anuncio del fichaje de Klopp por Red Bull ha provocado que algunos de los grandes clubes europeos que lo tenían en su punto de mira tengan que renunciar a ver al alemán en su banquillo. No ha trascendido la duración del contrato del técnico de Stuttgart , pero sí se sabe que es de larga duración. Solo hay una salvedad. Según asegura 'Sky Sports' Alemania, Klopp ha añadido una cláusula en su contrato que le permitiría marcharse de Red Bull para dirigir en un futuro a la selección alemana.
