València clama por el derecho a la vivienda y contra la turistificación
Los colectivos de barrio y sindicatos movilizan a los vecinos en una protesta masiva bajo el lema "València no está en venta", que deriva en una acampada en la Plaza del Ayuntamiento
El tejido asociativo valenciano se une por el derecho a la vivienda: “Hay que limitar la propiedad e intervenir el mercado”
Miles de personas han salido a la calle este sábado en València para reivindicar el derecho a la vivienda. La protesta de la capital valenciana aúna la defensa del territorio y clama contra la turistificación, elementos ligados al derecho a la vivienda digna.
A última hora de la tarde un grupo de personas han iniciado una acampada en la Plaza del Ayuntamiento. Durante la noche se están sumando más manifestantes con tiendas de campaña y han recibido el apoyo de dirigentes de izquierdas.
Los colectivos de barrio, asociaciones de vecinos y los sindicatos han sido el principal agente movilizador de una de las protestas más masivas que se recuerdan en la ciudad en años. Bajo el lema “Valencia no está en venta”, los vecinos exigen poder vivir en una ciudad que ha hecho del alquiler un lujo.
La protesta exige, en esencia, “que las viviendas sean para los vecinos”. Ni más obra nueva, ni apartamentos turísticos, sino poner los inmuebles al servicio de los ciudadanos. “Exigimos declarar Valencia ciudad tensionada de alquiler y turismo, prohibir los alquileres turísticos, proteger la huerta y frenar los desahucios”, explica el colectivo conocido como La Mataobras.
A gritos de “València s'ofega (Valencia se ahoga)”, la marcha ha clamado contra las medidas urbanísticas del PP valenciano y, a su vez, manifestantes reclamaban la dimisión de la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez.
Los manifestantes han recorrido el centro histórico de la ciudad, especialmente saturado, y las zonas más turistificadas, para expresar directamente a los turistas el rechazo.
La manifestación, que se ha iniciado en las Torres de Serrano y ha finalizado en la plaza del Ayuntamiento, ha estado marcada por cánticos como 'Foc, foc, foc a l'especulació' -'Fuego, fuego, fuego, a la especulación'- 'Ser casero no es una profesión', 'Tourist go home' -'Turistas, idos a casa'- o 'Un turista més, una veïna menys' -'Un turista más, una vecina menos'-.