La curiosa historia de un jubilado que compró un billete de avión vitalicio por 270.000 euros
Durante los años 90, Tom Stuker, un consultor en la industria automotriz en Nueva Jersey, tomó una decisión que no solo pocos podrían pagar, sino que también pocos se atreverían a tomar. Concretamente, en 1990, Stuker, de 35 años, se hizo con un billete de avión vitalicio, conocido como "Air Pass" o "Promoción error" de la aerolínea estadounidense United Airlines por 270.000 euros. Ahora, a sus 69 años, ha sido el ser humano que más kilómetros ha recorrido y no planea parar.
La historia de Tom Stuker comenzó cuando United Airlines ofreció este tipo de pases como parte de una estrategia para obtener liquidez en un momento en que la industria aérea no atravesaba un buen periodo. Stuker, además, viajaba por todo el mundo para trabajar con concesionarios de automóviles, por lo que vio en esta oferta una oportunidad para transformar su vida y, literalmente, elevar su negocio a nuevos niveles.
Viajes en primera clase, salas VIP y otros beneficios
Lo cierto es que cuando viajas constantemente en una misma aerolínea, tal y como es el caso de Stuker con su billete vitalicio, las millas que acumulas por "viajero frecuente" no pueden ser pocas. Así, Stuker ha cosechado un sinnúmero de beneficios adicionales gracias a su estatus. Los 'upgrades' a primera clase y el acceso a los lounges VIP de los aeropuertos se han convertido en algo cotidiano para él. Pero los beneficios no terminan ahí; Stuker tiene su propio asiento con una placa grabada en uno de los aviones de United.
Por si fuera poco, las millas de viajero frecuente no solo son útiles para reservar más vuelos. Al acumularlas, también se pueden canjear por experiencias exclusivas y lujos. Desde entonces, Stuker ha vivido como un verdadero magnate gracias a las millas de United Airlines: ha disfrutado de suites de hotel cinco estrellas alrededor del mundo, navegado en cruceros de lujo y ha degustado comidas gourmet en múltiples destinos.
A lo largo de los 34 años que lleva volando, Stuker ha realizado más de 12.000 vuelos. De hecho, tan solo en 2019 recorrió el kilometraje equivalente a seis viajes a la luna, transformando esta inversión en algo mucho más grande de lo que imaginaba en un principio.
Una inversión que salió a cuentas
En términos numéricos, la compra que Tom Stuker hizo hace 34 años ha sido una verdadera ganga. Si analizamos su año más activo, en 2019, durante el cual realizó 373 vuelos en 365 días, esos vuelos le habrían costado aproximadamente 2,2 millones de euros. Esta cifra es notablemente superior al precio que pagó en 1990 por su billete vitalicio, lo que representa una diferencia de 1,93 millones de euros. En otras palabras, el valor de esos vuelos fue casi ocho veces el coste original de su billete.