La victoria del Barça ante el
Bayern sí es el gran cartel del
Barça en su 125 aniversario. No solo el resultado fue espectacular (4-1) sino que el partido, desde el primer minuto con gol incluido hasta el pitido final, fue una obra de arte. Divertido, atractivo, intenso, muy bien jugado y con tantas pinceladas de genialidad que será recordado durante años. Anoche, el único monigote con tembleques fue
Neuer, el gran meta alemán, que vio como el Barça le remataba cuatro veces y le metía cuatro goles. No paró ni una. Y es que
Raphinha no solo le marcó un hat-trick, sino que le marcó tres goles al contraataque, a cuál mejor. Como si de fútbol americano se tratase, el brasileño corrió siempre al espacio para aprovechar los pases profundos, precisos y perfectos. En el primer gol, el quarter-back fue Fermín. En el segundo,
Casadó. En el tercero,
Lamine Yamal. Y es que anoche, todos los jugadores de la Masia se lucieron ante el mundo en el partido más importante de la temporada y ante un
Bayern Múnich que jugó una muy buena primera parte… y se fue perdiendo por 3-1.
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