¿Por qué ha dimitido Íñigo Errejón? Las causas de su adiós a la política y a Sumar
Íñigo Errejón abandona la política y su actual cargo como portavoz de la formación Sumar. Así lo ha formalizado el político en una carta abierta hacia sus seguidores en la red social X, en la que argumenta que "ha llegado al límite de la contradicción entre el personaje y la persona".
Asimismo, durante la jornada de hoy, también se han hecho públicas unas acusaciones hacia su persona reveladas por el diario Público por parte de varias mujeres que habrían presuntamente recibido malos tratos por parte del ya exportavoz de Sumar. Tanta relevancia han adquirido estas acusaciones que la formación previamente presidida y liderada por Yolanda Díaz ha comenzado una investigación para recabar información relacionada con estas denuncias.
La formación ha contado que ha sido en esta misma mañana de la jornada de hoy que errejón les envió su "dimisión irrevocable como miembro de la ejecutiva, diputado y portavoz" del Grupo Parlamentario del Partido, así como sentencian que, desde Sumar, aspiran a "a construir una sociedad justa y una política feminista" que requiere de un "compromiso firme en todos los ámbitos".
Los motivos detrás del adiós de Errejón
Se desconoce a ciencia cierta cómo y cuánto han tenido que influir estas acusaciones en la dimisión de una de las cabezas más reconocidas del primer Podemos y de la izquierda española en la última década, pero en su carta Errejón acuñó argumentos más personales para justificar su adiós.
Concretamente, el exportavoz ha esgrimido que "el ritmo y el modo de vida de la primera línea política, durante una década" había desgastado su salud física y mental, así como su "estructura afectiva y emocional".
Asimismo, Errejón asegura que había llegado a su "límite de la contradicción entre el personaje y la persona", así como reveló que llevaba tiempo "trabajando en un proceso personal y de acompañamiento psicológico" llegando a la conclusión de que debía abandonar la política para cuidarse de manera efectiva ante este ritmo de vida que asegura.
Sin embargo, quiso quedarse también con las cosas positivas: "He tenido el privilegio de defender las ideas que considero más hermosas y justas, y de hacerlo durante una de las décadas más intensas, pero también más duras, de la política española".
Con ello, Errejón abandona la política acusando un agotamiento a todos los niveles, así como argumenta que no ha podido continuar con las contradicciones entre su personaje y su propia persona, sin olvidar la cuestión de fondo de las mencionadas acusaciones, aunque él mismo no haya querido dirigirse a esta cuestión por el momento.