Le duran poco los disgustos al Barcelona . Tras caer el fin de semana ante el Unicaja, los azulgranas se recompusieron y vencieron este martes al Efes turco. Lo consiguieron gracias al acierto de Metu , al liderazgo de Punter en los momentos calientes y a la gran dirección de juego de Juan Núñez . El madrileño, frío desde que desembarcó en Barcelona el pasado verano, ha dado un paso adelante desde la lesión de Laprovittola y, en Estambul, fue de los más destacados de los catalanes. De hecho, sus asistencias y defensa en el tercer cuarto redujeron a los turcos y guiaron al Barça a la victoria que le permite seguir como líder de la Euroliga. Solo tardó un minuto y medio Tomislav Mijatovic , técnico local, en pedir el primer tiempo muerto de la tarde. La razón es que la pizarra de Peñarroya salió a la perfección y el Barça lanzó tres triples liberados, dos de Parker y uno de Abrines, para cimentar la primera ventaja del duelo. Gran inicio al que quiso unirse Punter , autor de cinco puntos consecutivos. El mazazo del Barça fue tremendo, estaba perdido el Efes y obligaba a sus estrellas, Thompson y Poirier, a poner sobre la pista toda su calidad para que los turcos no se descolgasen en el electrónico. Nwora y Bryant , tanques humanos, se pusieron al mando de las operaciones, comenzaron a penetrar como si no hubiese un mañana y, de la nada, el Efes consiguió devolver el golpe. Puede que el equipo de Estambul no sea el de antaño, campeón europeo en 2020 y 2021, pero todavía mantiene alma de ganador. Su defensa era excelente, el Barça acumulaba muchas pérdidas y no le quedó más remedio que entregarse al músculo de Vesely, Satoransky, Metu y Anderson, de los mejores en la últimas semanas. Con estos jugadores en cancha, los azulgranas son duros de pelar. Intercambian las posiciones en defensa, todos pueden anotar y el esfuerzo no es negociable. Fue Metu el más acertado, capaz el nigeriano de meterlas bajo el aro o desde el triple, y el Barça consiguió reducir el fuego turco. Pero de nuevo, fue la defensa del Efes la que devolvió la fricción al partido. El ritmo era apasionante, los cambios de lideratos constantes, igualdad eterna que deshizo Punter con un impresionante triple sobre la bocina, acción que permitió a los azulgranas llegar al descanso con cuatro puntos de ventaja. Tras la reanudación, Núñez tuvo uno de sus clásicos trances. Anotó un triple, dio una buena asistencia a Hernangómez y provocó una falta en ataque. Tres acciones de categoría que envalentonaron al Barça y que le permitieron conseguir un colchón de dobles dígitos. El base madrileño fue el protagonista del tercer cuarto, hacía mucho y casi todo bien, reducía él solo al Efes y solo faltaba un poco de acierto colectivo para que se escribiese un antes y un después en el duelo. A ello le puso remedio Punter con un nuevo triple y, al fin, el Barça despegó. Estaban de rodillas los de Estambul y los visitantes no desaprovecharon la oportunidad. Algún que otro despiste defensivo prolongó la esperanza local, pero la victoria del Barça nunca corrió peligro, más si se tiene en cuenta que la sociedad formada por Punter y Núñez no aflojó hasta el final. Los chicos de Peñarroya seguirán al menos 48 horas más como líderes de la Euroliga.
