La Policía Local de Sevilla vuelve a cortar el tráfico de la SE-20 tras anegarse junto al parque de Miraflores

Para la tragedia que pudo haber sido, y que tristemente se ha producido en diferentes puntos del territorio nacional y de Andalucía oriental, la provincia de Sevilla ha corrido cierta 'buena suerte' con la DANA que sigue causando estragos en tantas provincias. No hay que lamentar daños personales, aunque sí materiales en algunos lugares como en Carmona, donde las fuertes lluvias han anegado la urbanización Entrearroyos , una zona residencial que, como su propio nombre indica, se construyó entre arroyos. Las imágenes del paso del agua cubriendo buena parte de las fachadas de las viviendas han corrido como la pólvora por las redes sociales. Fuentes del Ayuntamiento de la localidad confirmaron que era ésta la zona más afectada, cuya localización hace que sea propensa a sufrir inundaciones cuando se dan precipitaciones intensas . Bomberos y Policía Local de Carmona tuvieron que intervenir por los efectos que este temporal había tenido en esta zona de chalets, que dejó vehículos atrapados y dificultó el acceso a muchas parcelas. Esta urbanización de Carmona se encuentra «relativamente cerca» al casco urbano, donde afortunadamente las incidencias han sido menores. Aun así, desde el gobierno municipal desconocen si se ha tenido que actuar en otra de las 42 urbanizaciones que tiene la localidad, ya que en muchos casos los propios vecinos se ponen en contacto con los Servicios de Emergencia de Brenes por proximidad. En la capital hispalense, los servicios de Emergencias Sevilla han tenido que volver a cortar por la tarde el tráfico en la carretera SE-20 en sentido aeropuerto, a la altura del Cortijo las Casillas. La acumulación de agua a la altura del parque de Miraflores hacía intransitable el paso de vehículos. Según informa el Ayuntamiento de Sevilla, la crecida del río Tamarguillo afectó a varias zonas agrícolas del entorno de la barriada de Valdezorras, cuya evolución deberá ser analizada en las próximas horas. Los servicios de Bomberos tuvieron que sumergirse en el cauce del río Guadaíra para poner a salvo a varios caballos que habían quedado atrapados por la crecida del agua. También, junto a la carretera SE-30, en el cruce de las calles Averroes y Eúfrates, los agentes de la Policía Local tuvieron que realizar un corte de tráfico de un carril por el hundimiento de una parte de la calzada por la cantidad de agua acumulada sobre el asfalto. A primera hora de la mañana se informó desde el Ayuntamiento que se cerrarían todos los parques e instalaciones deportivas de titularidad municipal, como medida preventiva ante la previsión de lluvias durante todo el día, y mientras durara el aviso por nivel naranja por precipitaciones. La mayoría de colegios suspendió sus clases extraescolares y, como ejemplo, la Universidad Loyola suspendió todas sus clases.