Cuando la derrota te hace más fuerte: Iván García Morgado, de 13 años, campeón de España de boxeo

«Lo primero que les enseño es a perder, porque ganar sabe todo el mundo. Deben aprender a perder. Para eso trabajo mucho el punto psicológico, les doy a entender que esto es un deporte y que, por mucho que te esfuerces, no quiere decir que vayas a ganar. Los animo siempre a que den lo máximo, pero que tengan presente la premisa de que, dando lo máximo, no quiere decir que vayas a ganar». La reflexión es de José Manuel Rubio del Pozuelo , entrenador del toledano Iván García Morgado , de 13 años, que se ha proclamado campeón de España cadete de boxeo por clubes para menos de 48 kilos. Pero en julio este chaval de Los Yébenes no llegó a la final. «Iván ya ha tenido esa experiencia. El año pasado quedó tercero porque perdió. Lo encajó bien y lo vi muy bien. Como yo los enseño desde esa premisa, después de tener una derrota no se vienen abajo. Lo que entienden es que, si quieren una victoria, tienen que entrenar más». «Llevo muchos años en esto... Cuando a un chico lo preparas y conciencias para ser un ganador, no saben asimilarlo cuando les dan por perdedor en un combate, donde hay una adrenalina brutal. La primera vez que pierden, rompen a llorar, se desmotivan y dejan el boxeo », cuenta José Manuel desde la experiencia. Iván ya tiene su título en casa por ser el mejor después de dos combates, pero no ha sido fácil. «Es un chaval muy disciplinado, que entrena de lunes a sábado de dos a cuatro horas. Porque otro carácter no le sirve; en el boxeo hay que ser muy disciplinado», insiste su entrenador después del triunfo de su pupilo como representante del club Mastodont Fitness de Los Yébenes. El camino ha sido inverso para Mario Hernández Fernández, también de 13 años, que no ha podido revalidar su título, aunque este toledano de Bargas ha firmado un meritorio tercer puesto en la categoría para menos de 40 kilos. «Al perder en el primer combate, se quedó un poco sorprendido, pero el consuelo que tuvo fue que quien lo ganó quedó el primero ». Lo cuenta su padre, Carlos Hernández , su entrenador en el Gimnasio Límite. «De vez en cuando, viene bien perder», subraya el progenitor, porque «están en unas edades en las que deben saber perder». Mario entrena de lunes a viernes, una hora cada día, y Carlos cuenta que su hijo ha vuelto a los entrenamientos más motivado. Porque tanto Mario como Iván no pueden bajar la guardia, ya que en julio tienen el campeonato de España por comunidades. Su objetivo es ser los primeros, pero están preparados para no venirse abajo si la meta no se consigue. Ya lo dice Rocky Balboa: «A la cima no se llega superando a los demás, sino superándote a ti mismo».