Andalucía se suma a Cataluña y no dejará llenar piscinas privadas
La Comisión para la Gestión de la Sequía de las demarcaciones hidrográficas de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas y del Guadalete-Barbate acordó el pasado miércoles por unanimidad permitir el llenado de piscinas públicas municipales, de centros terapéuticos, de alojamientos turísticos del registro oficial de la Junta y de las relativas a clubes deportivos o sociales. En definitiva, se ha dado vía libre a todas las posibilidades excepto a las de titularidad privada, ya sea de tipo individual como de comunidades. Esta relajación de medidas se aplicará en la franja costera que va desde el Campo de Gibraltar hasta el litoral almeriense. De hecho, que la decisión se circunscriba únicamente a estas dos cuencas se debe a que el resto de las que suministran agua en Andalucía son de titularidad estatal. Responsable regional Tanto es así que el viernes, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas abogó por una «tremenda prudencia» ante este permiso estival, pues la situación de sequía sigue sobre la mesa. La reciente postura de la Generalitat catalana había sido la contraria, la de prohibición. Por ello, Planas recordó que «cada administración tiene que asumir su responsabilidad» en la materia. En ese sentido, la Junta de Andalucía se inclinó por el sí tras dos reuniones telemáticas de la citada Comisión en la que se cotejaron los aportes de 45 y 22 hectómetros cúbicos que había dejado el último período de lluvias en la cuenca del Guadalete-Barbate y Cuencas Mediterráneas. Ramiro Angulo, presidente de la Comisión para la Gestión de la Sequía (que integran miembros de otros departamentos del Ejecutivo regional, sindicatos, empresas y organizaciones ecologistas), recordó que «dentro de 15 días se convocará de nuevo» para analizar el resultado final de las escorrentías y de futuras lluvias potenciales. En función de ello se tomará una decisión de cara al abastecimiento y los sistemas productivos, siempre dentro de las medidas e infraestructuras que prevé el cuarto Decreto de Sequía para seguir avanzando hacia el equilibrio hídrico en la comunidad. Por su parte, el Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla aclaró que la prohibición de llenado en piscinas de comunidades de propietarios «permitirá a las mismas, y a los profesionales de la administración de fincas, adoptar estas medidas restrictivas con la seguridad jurídica que se venía reclamando desde que comenzaron las limitaciones el pasado verano en la Axarquía». Aseguraron estar a la espera del BOJA para analizarlas en profundidad. Cataluña fue la primera en anunciar restricciones y la más controvertida fue la prohibición de rellenar piscinas de hoteles y campings con agua dulce. Solo se permitía utilizar agua de mar y mientras su vaciado posterior no acabara en el alcantarillado público, informa Alex Gubern. Desaladoras portátiles Para no perjudicar al sector hotelero, la Generalitat relajó sus medidas y anunció recientemente que permitiría el uso de desaladoras privadas, un guiño al turismo acompañado también de una mayor permisividad para agricultores y ganaderos, que habían puesto el problema del agua como una de sus principales reivindicaciones en las protestas que llevan a cabo desde hace semanas. En el caso de las desaladoras, el Gobierno catalán ha aprobado permitir su uso con la «única finalidad de mantener la actividad económica y los puestos de trabajo de esta actividad». En caso de que haya un excedente de agua, se obligará a los hoteleros a compartirla. Otro tanto sucede en el sector industrial. En el caso de la ganadería, se permitirá sortear la reducción del 50% fijada ahora en las explotaciones donde la actividad se basa en hembras reproductoras.