Incomodidad
Contratapa
Observo, atraído por sus enigmáticas actitudes, los suaves movimientos de la gata, reina y señora de esta casa. En su mano derecha hace descansar su cabeza, vuelca el cuerpo apoyando las dos patitas en paralelo en la alfombra en la que se ha acostado y cierra los ojos, no sé si se duerme de inmediato o se propone dormirse; una vez en esa postura su cola se mueve...